El código penal cubano contempla el derecho a la libertad condicional, tras haber cumplido al menos la mitad de la condena, pero familiares de presos políticos en la isla, quienes han cumplido ya suficiente tiempo para que les sea otorgado este cambio de medida denunciaron en entrevista con Radio Televisión Martí que ninguno ha sido liberado.
Ante el anuncio de las autoridades cubanas de la excarcelación de 6,579 reos para disminuir la población penal en medio de la pandemia, muchos esperaron que los presos políticos fueran liberados, algo que aún no ha sido constatado por ningún grupo de monitoreo de derechos humanos en Cuba.
Tampoco estos prisioneros políticos han sido favorecidos con la libertad condicional.
En enero de este año el Tribunal Municipal de San Juan y Martínez negó la libertad condicional al activista de la Mesa de Diálogo de la Juventud Cubana, José Rolando Cásares.
En entrevista con Radio Televisión Martí, su esposa Yamilka Abascal, no sólo habló del caso de José Rolando, quien cumple desde el 2017 una condena de cinco años de prisión por el delito de desacato, sino que abogó por la suerte de todos los presos políticos.
"La vida de todos ellos peligra en las prisiones en medio de este pandemia", indicó Abascal para quien la vida junto a sus hijos se ha hecho mucho más difícil por estos días pues no tiene con quien dejarlos en casa para ir a comprar provisiones.
Cáceres Soto y Yamilka Abaskal integran la Mesa de Diálogo de la Juventud Cubana y fueron sancionados en 2017 por los delitos de atentado, resistencia y desacato a la figura del exgobernante Fidel Castro. Ambos se declararon inocentes de los cargos.
Al opositor lo sentenciaron a cinco años con internamiento y a Abascal (con ocho meses de embarazo), a dos sin internamiento, los que cumplió a inicios de 2019.
El proceso para otorgar el beneficio de la libertad condicional a un preso se inicia cuando el centro penitenciario donde está recluido hace la solicitud al Tribunal donde fue juzgado.
Cuando Miguel Díaz-Canel llegó al poder dijo en una entrevista, que revisarían los casos de presos con más de 20 años de condena, recuerda Graciela Suárez, madre del preso político Humberto Real Suárez.
"No sé porque no ha sido liberado", dijo la mujer quien indicó que su hijo ha mantenido una buena conducta en prisión y ahora en medio de esta pandemia lo necesita más que nunca.
Humberto está recluido en la prisión provincial de Agüica, en Matanzas, lleva 26 años cumplidos de una condena de 30, luego de intentar desembarcar en Cuba, procedente de Estados Unidos en 1994.
Mitzael Díaz Paseiro, está en una prisión de Santa Clara y su esposa Arianna López Roque expresa que son insuficientes las excarcelaciones.
"Pienso en mi esposo que está enfermo y pienso en hombres y mujeres que son muy ancianos y enfermos.
Díaz Paseiro pertenece al Frente Nacional de Resistencia Cívica, cumple condena de tres años y medio desde 2017 por el delito de Peligrosidad Social Pre Delictiva.
Adya Expósito, esposa del pastor evangélico Ramón Rigal, comenta que contrató los servicios de un abogado para gestionar la condicional para su esposo condenado a dos años de cárcel en abril del 2019 por el delito de Actos Contra el Normal Desarrollo del Menor, cuando intentó educar a sus hijos en el hogar.
"A él ya le lo tocaría pues ha cumplido la mitad de la sanción", dijo la pastora evangélica quien estuvo encarcelada en la Prisión de Mujeres de Guantánamo desde el 16 de abril de 2019 hasta que recibió en marzo la libertad condicional.
Finalmente está el caso del periodista Roberto Jesús Quiñones Haces, que lleva ya casi ocho meses en el Combinado Sur, donde nunca debió estar, afirma su hijo Roberto José Quiñones Castro.
Quiñones Haces, de 63 años, es colaborador de la publicación Cubanet y fue condenado a un año de prisión por ejercer el periodismo independiente. La sentencia le fue sustituida por un año de trabajo correccional con internamiento bajo los cargos de “resistencia” y “desobediencia”.
A Quiñones, quien es vulnerable al COVID-19 pues está en edad de riesgo y padece de múltiples enfermedades crónicas, le fue negada la libertad condicional.