La Casa Blanca anunció que el presidente Barack Obama recibirá el miércoles al Dalai Lama, reunión que suscitó de inmediato la "firme oposición" del gobierno de China.
El encuentro con el líder espiritual de los tibetanos, que tendrá lugar en la Sala de Mapas de la Casa Blanca, y no en la Oficina oval, no estará abierto a la prensa, indicó la presidencia y la cita será a las 10 y 15 de la mañana de este miércoles.Obama y el líder religioso ya se encontraron en varias ocasiones, informa la agencia AFP.
"Hemos tomado nota de las informaciones sobre esta reunión privada" declaró el miércoles el portavoz de la diplomacia china, Lu Kang, quien ha "hecho saber a la parte estadounidense su firme oposición" ante este encuentro. "Si tal encuentro se llevara a cabo, enviaría una mala señal a las fuerzas separatistas que buscan la independencia del Tibet" y "afectará la confianza mutua y la cooperación" con Washington, añadió el portavoz, con lo que reitera la tradicional posición china al respecto.
En febrero de 2014, la Casa Blanca tuvo la precaución de subrayar que el Dalái Lama era recibido "como un jefe espiritual y cultural respetado internacionalmente", dando a entender que no era invitado como dirigente político. Aquel encuentro fue también cerrado a la prensa. Pese a las precauciones, Pekín calificó de inmediato la entrevista como "una grosera injerencia" en sus asuntos internos. Lu indicó que el Ministerio chino de Exteriores ha informado a Washington de su "firme oposición" al encuentro, ya que los asuntos de Tíbet son "cuestiones domésticas de China" y ningún país tiene derecho a interferir en ellos, destaca por su parte desde Pekín la agencia EFE.
Oficialmente retirado de la política, el Dalái Lama insta más a una autonomía para el Tíbet que a la independencia formal. Numerosos tibetanos denuncian ser víctimas de represión política y cultural por parte de China, y estiman que no gozan del desarrollo económico de su región.