El nuevo gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, no ha mostrado "la más mínima voluntad de rectificación" en la conducta represiva del régimen en sus primeros 100 días en el poder, señaló este sábado el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).
Según el OCDH, "esta etapa inicial, donde debió comenzar a implementarse un programa de gestión del gobierno, ha estado marcada por un continuismo obediente", que en materia de derechos humanos y libertades civiles "ha significado un retroceso en el que se han profundizado los métodos represivos y otras formas de acoso y hostigamiento contra la sociedad civil".
La organización defensora de los derechos humanos subraya que a pesar de que el "índice de detenciones arbitrarias se ha reducido, se aprecia una mutación hacia lo que llamó una "represión de diseño".
"La represión personalizada se estructura a partir de la confección de perfiles psicológicos, del estudio del entorno familiar y laboral, las relaciones personales, los vínculos afectivos de cada individuo, incluidas sus preferencias sexuales, vínculos con la comunidad y red de amigos o personas relacionadas", detalló el OCDH en un comunicado.
La organización destacó que la Seguridad del Estado (policía política) mantiene "un riguroso escrutinio sobre las organizaciones pacíficas más activas en el reclamo del respeto a los Derechos Humanos, como son las Damas de Blanco y la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU)".
Doce nuevos encarcelamientos por motivos políticos
En su informe, la OCDH detalla que en estos 100 días de gobierno de Díaz-Canel, el régimen cubano "ha prohibido salir del país a más de veinte personas (contando solo a UNPACU y Damas de Blanco); se ha incrementado el número de presos políticos en 12 nuevos encarcelados", tres Damas de Blanco y nueve miembros de (UNPACU).
La organización cita el caso del científico Ariel Ruiz Urquiola como "un claro ejemplo" de que el gobierno cubano mantiene la política de mano dura conr especto a sus oponentes.
"El régimen se encargó de dejar claro que su excarcelación no es una libertad incondicional, sino una licencia extrapenal. Esto significa que la causa sigue abierta y el señor Ruiz Urquiola puede regresar a prisión en el momento que el gobierno estime conveniente", apuntó la OCDH.
El OCDH en la mira de la policía política
El Observatorio, con sede en Madrid, España, dijo que durante el mes de julio la Seguridad del Estado acosó a varios de sus activistas en La Habana que habían sido invitados a participar en talleres de formación sobre derechos humanos en instituciones españolas.
Los talleres "tienen por objetivo el fortalecimiento de la sociedad civil, tal cual se entiende en Europa", agregó el comunicado.
El OCDH señaló que con estas "acciones de prevención o profilaxis, las autoridades presionaron e intimidaron a los invitados, hasta hacer desistir a algunos". Según la organización, los activistas "fueron puestos en la disyuntiva de que, para poder viajar, deberían informar a su regreso a la Seguridad del Estado de todas sus actividades y contactos durante su estancia en Madrid".
El Observatorio concluyó que el gobierno de Díaz-Canel "mantiene intacta la estructura represiva que heredó de su tutor", por lo que la situación de derechos humanos en Cuba no ha mejorado desde que llegó al poder.
(A partir de un informe del Observatorio Cubano de Derechos Humanos)