La oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas dijo el viernes que las imágenes del tiroteo contra Jacob Blake en Wisconsin parecen mostrar que el policía hizo un uso “excesivo” de la fuerza que fue probablemente discriminatorio en su naturaleza.
El incidente del domingo, grabado en video, mostró que Blake -un hombre negro de 29 años- recibió varios disparos por la espalda de un agente blanco mientras tres de sus pequeños hijos miraban. Las imágenes se han vuelto virales y han provocado fuertes protestas.
“Por las imágenes disponibles que hemos visto hasta el momento, el policía parece haber usado una fuerza contra Jacob Blake que sería excesiva”, dijo Rupert Colville en una comparecencia virtual en Ginebra, asegurando que la intervención no pareció cumplir con los estándares internacionales.
“También parece bastante posible que la fuerza usada contra Blake pudiera ser discriminatoria por su naturaleza”, agregó.
Colville es el portavoz de la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, cuya voz conlleva una autoridad moral, aunque su oficina no puede obligar a los países a cumplir con sus recomendaciones.
El tiroteo contra Blake provocó disturbios en Kenosha, Wisconsin, donde un adolescente disparó contra tres manifestantes en la noche del martes, matando a dos de ellos.
Al ser preguntado sobre el incidente, Colville lo describió como un ejemplo desafortunado de las medidas de control de armas “insuficientes y laxas” que hay en Estados Unidos, señalando que se han emitido repetidas advertencias para intentar evitar estos sucesos.
“Debería ser inconcebible tener a alguien de 17 años corriendo con un rifle automático con capacidad de disparar a la gente en una situación tan tensa”, indicó.
