La oposición venezolana organizó el sábado pequeñas protestas en las principales ciudades del país para condenar la sentencia de casi 14 años deprisión contra el líder político Leopoldo López, en un intento por conseguir apoyo de votantes indignados de cara a las elecciones parlamentarias de diciembre en las que lleva ventaja.
El líder del ala dura de la oposición, preso en una cárcel militar desde febrero del año pasado, fue condenado la semana pasada por incitar con su discurso unas protestas contra elGobierno venezolano, que a principios de 2014 dieron paso a hechos de violencia y causaron la muerte a 43 personas.
Cientos de activistas de la oposición se congregaron en el rico distrito de Chacao en Caracas, en el que López fue una vez alcalde, para denunciar un juicio que consideraron una farsa y que culminó con un fallo "malvado" de la jueza, a criterio de Beatriz Plana, una de las manifestantes que participó.
Otros activistas, optaron por mostrar, entre las banderas que ondeaban los partidos políticos, un maniquí que representaba a la jueza del caso, Susana Barreiros, mientras sostenía una cartera rellena de dólares falsos.
Protestas similares se organizaron también durante la mañana del sábado en las ciudades más pobladas del país, en respuesta a un juicio que ha sido denostado por algunos gobiernos, grupos de derechos humanos y ex presidentes latinoamericanos.
"La sentencia es lo más injusto que le ha pasado al país", dijo Nancy Suárez, de 58 años, una profesora de inglés que mostró moretones en su cuerpo que según dijo eran el resultado de empujones que recibió durante un enfrentamiento entre los partidarios de López y activistas que apoyan al Gobierno, el día en que se dio a conocer la condena.
"Nosotros no tenemos miedo, queremos luchar para la libertad de Venezuela. La gente está cansada de hacer cola", agregó.
Nicolás Maduro, el presidente del Gobierno socialista que acusó a López de intentar derrocarlo y se mostró a favor de la decisión judicial, ha visto caer su popularidad conforme crece el descontento en la población por la elevada inflación y laescasez de bienes básicos.
VENEZUELA NO HA DESPERTADO
El oficialismo podría perder la mayoría que ostenta en laAsamblea Nacional, según un sondeo de la encuestadora Datanálisis, que hasta julio calculó que el partido gobernante sólo obtendría el 28 por ciento de los votos, frente al 50,7 dela oposición.
Sin embargo, la oposición va fragmentada a las elecciones y sus críticos dicen que todavía no capitaliza completamente el descontento de una población preocupada por la escasez y la inseguridad, que no protestó masivamente el castigo contra uno de los líderes opositores.
"Todavía Venezuela no ha despertado, tal vez por miedo", afirmó Frankys Henríquez, de 36 años, que por primera vez decidió acudir al llamado a manifestarse lanzado por la oposición.
"La oposición tiene que proyectarse con más fuerza, con mejores mensajes", agregó Henríquez, padre de dos niñas.