El presidente ruso, Vladimir Putin, agradeció al Papa Francisco por las "muy sustantivas" conversaciones el jueves, un día antes de que los líderes de la iglesia católica de Ucrania acudan al Vaticano a discutir la crisis del país.
Putin, quien se había encontrado con el Papa dos veces antes, arribó una hora tarde.
El mandatario ruso también llegó 50 minutos tarde a su primer encuentro con el Papa Francisco en 2013 y tuvo una tardanza de más de una hora en su última visita en 2015.
"Gracias por el tiempo que me ha dedicado", afirmó Putin al finalizar las conversaciones que se prolongaron por 55 minutos, con la ayuda de dos intérpretes.
"Fue una discusión muy sustantiva e interesante", le aseguró al Papa cerca de los periodistas cuando intercambiaban regalos en el estudio papal privado, que el Papa sólo utiliza para ocasiones oficiales.
Un comunicado del Vaticano señaló que las conversaciones se enfocaron en las situaciones en Siria, Ucrania y Venezuela.
Putin y el canciller ruso, Sergey Lavrov, quien no estuvo presente en la conversación, luego sostuvieron una reunión separada con el secretario de estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, y su ministro de Exteriores, el arzobispo Paul Gallagher.
Francisco le regaló a Putin una copia firmada de su mensaje de paz para este año y grabado del Siglo XVIII de la Plaza de San Pedro, "para que no olvide Roma".
Mientras, Putin le obsequió un DVD de una película del pintor y escultor del Renacimiento Michelangelo, del cineasta ruso Andrei Konchalovsky, y un gran ícono ortodoxo pintado de los apóstoles Pedro y Pablo.