El exilio cubano y sus ascendentes han sido ejemplo de éxito en Estados Unidos, no solo en lo político sino también en lo económico y la posible nominación de la abogada cubanoamericana Bárbara Lagoa a ocupar una vacante en el Tribunal Supremo de Justicia puede que sea el puntillazo.
De cristalizar la propuesta del presidente Donald Trump, sería la primera persona de origen cubano que llega a la máxima instancia judicial del país. De ahí que la excongresista de EEUU Ileana Ros-Lehtinen haya manifestado su satisfacción al conocer la noticia.
“Es hija de refugiados cubanos, se crió en Hialeah, asistió a la Escuela Católica Inmaculada Concepción y se graduó de mi alma mater, la Universidad Internacional de la Florida antes de obtener su título en Derecho en la Universidad de Columbia, Nueva York”, dijo a Radio Televisión Martí, Ros-Lehtinen, la primera cubana y latina que gana una elección y llega al congreso de EEUU.
Raúl Martínez, nació en Cuba y creció en Hialeah. Es considerado un lobo de la política local y nacional, afiliado al Partido Demócrata, y no por gusto, fue alcalde de la llamada Ciudad que Progresa por 24 años. En su opinión, se trata de una jugada de Trump.
“Es cubana, de Florida y el presidente está teniendo dificultades con este estado y quiere consolidar el voto cubanoamericano. Más que eso, no puedo decir”, indicó Martínez, nacido en Santiago de Cuba.
Es la segunda vez que una persona de raíces cubanas hace noticia como posible aspirante a la Corte Suprema. En 2015, el diario The New York Times, mencionó a Adalberto José Jordán entre seis candidatos a llenar la vacante tras la muerte del juez Antonin Scalia.
Pero a Bárbara Lagoa, primera cubana que llega al Tribunal Supremo del estado de Florida y que hoy se desempeña como jueza del importante 11no Circuito de Apelaciones de Atlanta, le sobran buenos deseos.
“Es una lástima que algunos estén en contra de que el presidente tome la decisión cuando eso es lo que han hecho todos los presidentes. Le deseamos suerte y ojalá que nos pueda representar a tan alto nivel”, manifestó Ninoska Pérez, del Consejo por la Libertad de Cuba.
“Nos llena de orgullo saber que los cubanos hemos llegado tan lejos en este país, que hijos de exiliados cubanos como el caso de la jueza Lagoa están a las puertas de la Corte Suprema”, agregó.
El ex alcalde de Hialeah no considera que sería una buena elección.“No lleva suficiente tiempo en la corte de apelaciones, carece de experiencia como para sentarse en una de las sillas del Tribunal Supremo”, dijo.
Todo lo contrario, para Ros-Lehtinen. "Es nuestro orgullo. El sur de Florida estará muy orgulloso de este nombramiento”.
Sobre Lagoa, en declaraciones a la prensa, el presidente Trump dijo: "Es muy apreciada y estoy recibiendo muchas llamadas telefónicas de mucha gente. Tiene mucho apoyo. No la conozco, pero escuché que es sobresaliente".
En comentarios a Fox News, el mandatario adelantó que podría reunirse con la jueza cubanoamericana durante la visita que realizará esta semana al estado de Florida. Se espera que Trump anuncie su nominada este viernes o sábado.
Marcel Felipe, directivo de la ONG Inspire America, dijo que eso es precisamente lo que desea para “nuestra gente en Cuba”.
“Que tengan la libertad de superarse y llegar a lo más alto que puedan y no que tenga un techo artificial impuesto por la élite gobernante que reserva para ellos y sus familiares los grandes puestos. Estamos orgullosos de la jueza Lagoa y eso nos da esperanza para una Cuba del futuro”, indicó.