Los activistas de la Unión Patriótica de Cuba Isaín López Luna, Carlos A. Calderín Roca y Alexander Rodríguez, acusados de atentado y desacato fueron conducidos el pasado 24 de julio a la cárcel habanera de Valle Grande luego de haber permanecido en los calabozos del centro de detención de El Vivac por más de dos semanas.
Los tres jóvenes decidieron realizar una "sentada" en el Parque Central el 8 de julio para pedir el cese de la represión contra otros activistas. De ello, resultaron arrestados y acusados de delitos que no han cometido, dijo a Martí Noticias Wilberto Parada, activista de UNPACU que ha estado a cargo del caso.
Parada calificó de arbitrario e ilegal lo que han hecho contra los jóvenes y recordó que existe un video de la forma en que realizaron la protesta "que fue pacífica, no ofrecieron resistencia". "No hay razón para que los acusen", concluyó.