A continuación, un editorial que refleja la opinión del gobierno de Estados Unidos:
Con la escalada de las tensiones geopolíticas, el riesgo de una guerra nuclear está en su punto más alto en décadas, según las Naciones Unidas. Hoy en día, nuevas guerras han promovido una sensación de inquietud, y las armas nucleares están de vuelta en la conciencia pública.
Estados Unidos está comprometido a fortalecer y defender el régimen de no proliferación nuclear y desarme, centrado en el Tratado de No Proliferación, dijo la representante permanente de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
"Y, sin embargo, el marco global que ha frenado el armamento nuclear durante años está bajo una presión cada vez mayor", dijo. "Irán ha continuado expandiendo segmentos de su programa nuclear sin ninguna justificación civil creíble, y durante más de cinco años no ha cooperado con el OIEA”, explicó.
"Desde que lanzó su invasión a gran escala de Ucrania, Rusia ha invocado irresponsablemente una peligrosa retórica nuclear y se ha alejado de varias de sus obligaciones de control de armas", dijo la embajadora Thomas-Greenfield.
"Mientras tanto, China ha acumulado y diversificado rápida y opacamente sus reservas de armas nucleares. Y Rusia y China se han mostrado reacios a entablar discusiones sustantivas sobre el control de armas o la reducción de riesgos", agregó. "Lo que es más, ambos países han defendido e incluso permitido a los proliferadores peligrosos".
Y luego está Corea del Norte, "que continúa su desarrollo ilegal de armas de destrucción masiva y misiles balísticos", dijo la embajadora Thomas-Greenfield.
Pero "no son solo estos actores individuales los que ejercen presión sobre el régimen global de no proliferación". Hoy en día, señaló, “nuestro régimen actual se enfrenta a desafíos nuevos y cambiantes: como la inteligencia artificial, que puede ser pirateada o funcionar mal, malinterpretarse o proporcionar información errónea".
"Podemos hacer un balance de los desafíos que plantean estas nuevas tecnologías y, lo que es más importante, comprometernos a abordarlos", dijo la embajadora Thomas-Greenfield.
"Y luego está la cuestión del espacio ultraterrestre y el tratado que lo rige", comentó.
"Junto con Japón, Estados Unidos presentó una resolución del Consejo de Seguridad, reafirmando las obligaciones fundamentales que las partes tienen en virtud de este Tratado, y pidiendo además a los Estados miembros que no desarrollen armas nucleares, u otros tipos de armas de destrucción masiva, que estén diseñadas específicamente para ser colocadas en órbita alrededor de la Tierra", dijo.
"Estados Unidos ya ha comenzado a considerar enfoques para ayudar a garantizar que los países no puedan desplegar armas nucleares en órbita sin ser detectados, y tenemos la intención de colaborar con otros Estados Partes a medida que evolucionen nuestras ideas", afirmó la embajadora Thomas-Greenfield. "Permítanme ser claro: cualquier colocación de armas nucleares en órbita alrededor de la Tierra no tendría precedentes, sería peligrosa e inaceptable".