LA HABANA- En las puertas de la Agencia Cubana de Vuelos Nacionales, radicada en la Calle Infanta en el barrio habanero del Vedado, figura un pequeño cartel que menciona la suspensión hasta nuevo aviso de "todos" los vuelos nacionales.
En ese local se expenden los boletos de ida y regreso hacia distintos destinos en la isla, ahora suspendidos sin que la población haya recibido una argumentación oficial de las razones de esta medida.
"Literalmente no hay aviones y los que están se encuentran en muy malas condiciones. Nosotros se lo hemos comunicado a quienes vienen acá. La medida que se está tomando es trasladar en guagua a aquellos pasajeros que obtuvieron ya los boletos", comentó un agente de seguridad de la agencia que pidió no ser identificado.
Los ómnibus destinados a estas funciones tienen como punto de partida la terminal 1 del Aeropuerto Nacional José Martí, desde donde salen los vuelos nacionales a las diferentes provincias.
Sin embargo, la tarde de este miércoles Martí Noticias visitó la terminal aérea y los reportes eran contradictorios. Al parecer los ómnibus se dedicarán a suplir el servicio de los vuelos de menor capacidad y frecuencia, y se mantendrían saliendo algunos vuelos que ya estaban vendidos.
Lo que sí quedará suspendida es la venta de nuevos boletos.
El "papelito" colocado en la fachada de la agencia hace apenas dos días no explica los motivos de esta decisión de Cubana de Aviación. Los medios nacionales, dígase prensa plana, radial o televisiva, tampoco han pronunciado algún dictamen o nota oficial informando sobre un asunto altamente sensible para la movilidad de los ciudadanos y los servicios de transporte en el país.
La agencia Cubana de Aviación solo esclarece ante aquellos que asisten en búsqueda de pasajes, la ausencia de aeroplanos, según confirmó Martí Noticias en el lugar. Las puertas de la agencia permanecen cerradas.
Sobre la disposición de trasladar en ómnibus a los pasajeros, el agente entrevistado por Martí Noticias dijo que no ha sido bien recibida por la población.
"La medida no ha sido bien aceptada porque -a pesar de que las guaguas están cómodas- los clientes vienen preparados para una hora de viaje, no para 12 ó 18 en el caso de los que van al oriente del país. Esta situación puede durar desde una semana hasta tres meses", señaló la fuente.
Poco a poco se iban aglomerando en los portales del sitio personas en busca de alguna justificación sobre la suspensión de vuelos. Sofía Guerra, una joven camagüeyana radicada en la capital, se encontraba allí en horas tempranas de la mañana pretendiendo comprar un pasaje para poder visitar a su familia.
"Imagínate que dicen que hasta junio no se solucionará esto. Yo no he visto nada en el noticiero, sino no hubiese venido hasta acá. Ahora me tengo que pensar el viaje porque lo que era 1 hora de vuelo ahora se me vuelven casi ocho. Eso en el caso de resolver pasaje de ómnibus”, dijo la joven con escepticismo.
Los pasajes a sobre-precio y los sobornos a aquellos que laboran dentro de la empresa se traducen en el doble del costo inicial de cada boletín. Así lo menciona Lorayne Reyes, quien decidió no irse de vacaciones a Santiago de Cuba a causa de esta situación.
"Tendría que pagar 10 CUC o 250 pesos en moneda nacional (CUP) por encima del pasaje que me cuesta cerca de 200 pesos o más. La otra alternativa sería irme en camión, pero últimamente se han suscitado una cantidad de accidentes que realmente me da temor montarme en uno. Nos dejan sin alternativas viables", lamentó Reyes.
En Cuba, el tema del transporte -sea aéreo, terrestre, o marítimo- es un problema permanente en el país.
La ausencia de información que explique la inesperada medida refuerza un sentimiento de frustración e inconformidad entre la población, que pretende trasladarse dentro de su país y depende solamente del transporte público.
El pasado octubre se conoció que una de las mayores plantas de producción de aviones de Rusia -Voronezh Aircraft Production Association (VASO)― estaba en negociaciones con la aerolínea Cubana de Aviación con el fin de poner en funcionamiento nuevamente la pequeña flota de Il-96-300 cubanos.
En los últimos años, son varios los listados en los que Cubana de Aviación aparece mencionada como una de las peores compañías aéreas del mundo.
El Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC) es el organismo encargado de dirigir, ejecutar y controlar la política en cuanto al transporte aéreo, la navegación aérea civil y sus servicios auxiliares. La entidad la dirige desde 2010 el General de Brigada Ramón Martínez Echevarría.