La sorpresa política de la semana la dio uno de los dos candidatos cubano-americanos a la presidencia de los Estados Unidos.
Ya están a punto de comenzar el voto en las primarias en los distintos estados del país. Y en el primero, Iowa, las últimas encuestas le dan un margen cómodo a Ted Cruz, senador republicano por el estado de Texas, e hijo de un pastor evangélico nacido en Matanzas, Cuba.
En el caso particular de Iowa lo que ha llevado a Cruz al primer lugar en las encuestas es precisamente su religión. Más de la mitad de los votantes en el estado de Iowa son evangélicos.
La encuesta realizada por Bloomberg Politics/DesMonies Register muestra que Cruz cuenta con el apoyo del 31 % de los votantes republicanos del estado. Sorprende que el senador tejano ha logrado el mayor aumento en popularidad entre una encuesta y la otra en las últimas cinco campañas electorales para presidente.
Cruz aumentó su popularidad entre los votantes en un 10 por ciento en comparación con la encuesta realizada en octubre por la misma firma encuestadoras entre el 31 % de los posibles electores. El crecimiento en el respaldo de Cruz vino a cuesta del neurocirujano infantil Ben Carson, ahora en el tercer lugar entre los candidatos republicanos en ese estado.
En segundo lugar está el multi-millonario Donald Trump, quien en todas las encuestas nacionales está en primero.
Pero el sistema electoral norteamericano no funciona a base del voto o la popularidad del candidato. Las elecciones estadounidenses son una serie de elecciones celebradas en los distintos estados. Primero vienen las elecciones primarias. Iowa es el primer estado en el cual sus ciudadanos escogen a su candidato. Además el sistema electoral allí tiene la particularidad que en las primarias el voto no es secreto.
El día de las elecciones (1ro de febrero) los votantes se reúnen en los recintos electorales y ahí comienzan a discutir por quien van a votar. Los electores más convencidos de su candidato tratan de persuadir a otros votantes que se unan a ellos. El proceso dura el tiempo suficiente hasta que los concurrentes deciden emitir el resultado.
Con Iowa comienza la temporada de las elecciones primarias. Después hay citas en New Hampshire y Carolina del Sur. Eventualmente todos los estados del país tienen sus comicios y pasan sus resultados a la convención de cada uno de los partidos que se realiza en el verano.
Ganar Iowa le daría un buen impulso a Cruz, pero no le garantiza que va a ganar las primarias en los otros estados y mucho menos que va a ser el candidato elegido por el Partido Republicano para los comicios de noviembre.
Lo que sí es importante es que Cruz ya figura entre los principales aspirantes a la nominación presidencial del Partido Republicano. Hasta ahora el favorito ha sido Trump, seguido de lejos por Carson.
Pero en los últimos días Carson ha caído bastante y Cruz y el también senador cubanoamericano de la Florida Marco Rubio se han aprovechado de la caída del respaldo a Carson para subir sus números en las encuestas.
Cruz ha puesto mucho énfasis en conseguir el apoyo de los votantes de Iowa. Además de que una mayoría de ellos profesan la misma religión que el candidato, el cubano-americano se ha pasado seis de las últimas ocho semanas en Iowa cultivando el voto de los republicanos locales.