El presidente de EE.UU., Donald Trump, junto a unos 2 mil oficiales, soldados y funcionarios de su gabinete, anunció que hará "cambios drásticos" a su estrategia en Afganistán, porque retirar a las tropas del país tendría efectos "inaceptables" en la región, pero no quiso precisar cuántos soldados enviará a esa nación que lleva ya casi 16 años en guerra.
"No vamos a hablar de números de tropas ni sobre nuestros planes de actividades militares", dijo en la base militar de Fort Myer (Virginia).
Funcionarios del Congreso citados por los principales medios de EE.UU. dicen que la administración les ha adelantado que se enviarán unos 4.000 refuerzos a los cerca de 8.500 efectivos que ya se encuentran en la región.
Trump dijo que los estadounidenses se han cansado sin ver una victoria en la más larga guerra de Estados Unidos. Y destacó la necesidad de buscar un resultado honorable y duradero en Afganistán que sea digno de los sacrificios hechos. Dijo además que las consecuencias de una salida rápida del país crearían un vacío que sería llenado por los militantes islamistas.
El Presidente subrayó que los esfuerzos no se enfocarán en construir países a la imagen de EE.UU, sino en erradicar a los terroristas. "Comparto la frustración del pueblo estadounidense. También comparto su frustración por una política exterior que ha gastado demasiado tiempo, energía, dinero y, lo que es más importante, vidas, tratando de reconstruir los países a nuestra propia imagen, en lugar de perseguir nuestros intereses de seguridad por encima de todas las demás consideraciones".
Hasta ahora 2.403 estadounidenses han muerto en el conflicto iniciado hace 16 años, después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
"A partir de ahora, la victoria tendrá una definición clara: atacar a nuestros enemigos, aniquilar a Estado Islámico, aplastar a Al Qaeda, impedir que los talibanes se apoderen del país y abortar los ataques terroristas masivos contra los estadounidenses antes de que surjan", explicó Trump.
Admitió que su instinto original “era retirarnos, e históricamente me gusta seguir mis instintos. Pero toda mi vida escuché que las decisiones son muy diferentes cuando te sientas detrás del escritorio de la Oficina Oval".
También criticó a Pakistán, señalando que el país ha actuado como un refugio seguro para los "agentes del caos". Advirtió que ese país tiene "mucho que perder" si sigue "albergando" a "organizaciones terroristas" y a los talibanes dentro de sus fronteras.
"Hemos pagado a Pakistán miles de millones de dólares mientras albergan a los mismos terroristas que estamos combatiendo. Esto tiene que cambiar y cambiará de inmediato", dijo Trump.
Funcionarios estadounidenses creen que gran parte del liderazgo de la Red Haqqani, una rama de los talibanes afganos, tiene sus bases en Pakistán, y algunos analistas creen que la eliminación de sus refugios es fundamental para estabilizar Afganistán.
Por otra parte, Trump señaló que otro pilar de su estrategia en la zona es usar todos los poderes de Estados Unidos, tanto diplomáticos como militares.
Como indicó en su cuenta personal de Twitter @realDonaldTrump, las decisiones del Presidente se concretaron durante una reunión que sostuvo el sábado con el liderazgo militar en el retiro presidencial de Camp David, Maryland:
"Día importante en Camp David con nuestros muy talentosos generales y líderes militares. Muchas decisiones adoptadas, incluyendo a Afganistán".
Reacciones
El senador John McCain (republicano por Arizona), quien ha instado a Trump a articular una nueva estrategia para la región, elogió su distanciamiento del enfoque de la administración Obama.
"Creo que el presidente ahora nos está llevando más allá de la estrategia fallida de la administración anterior de meramente posponer la derrota," dijo McCain en una declaración. "Es especialmente importante que la nueva estrategia anunciada no fije una fecha límite para la retirada, sino que garantice que en el futuro cualquier decisión de reducir nuestro compromiso se base en las condiciones sobre el terreno".
Aunque Obama no cumplió su promesa de campaña de poner fin al conflicto, redujo considerablemente los niveles de tropas desde más de 100.000 y desplazó las fuerzas restantes a labores menos peligrosas de entrenamiento y asesoramiento.
El senador cubanoamericano Marco Rubio, republicano por Florida, consideró en su cuenta de Twitter @marcorubio que es una buena estrategia para Afganistán y que fue excelente el discurso en que el presidente la presentó la nacion.
Nancy Pelosi, demócrata por California y líder de la minoría en la Cámara de Representantes, criticó al actual mandatario en un comunicado, por falta de detalles. "Cuando el Presidente Trump dice que no habrá límite en el número de tropas ni calendario para la retirada, está declarando un compromiso sin término de vidas de estadounidenses, sin rendir cuentas al pueblo estadounidense", dijo.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, saludó la declaración de Trump y su "afirmación de apoyo a nuestros esfuerzos por lograr la autosuficiencia y nuestra lucha común para librar a la región de la amenaza del terrorismo".
Por su parte, el Talibán emitió una declaración desafiante, diciendo que Estados Unidos debería haber pensado en retirar sus tropas de Afganistán en lugar de prolongar la guerra.
"Parece que Estados Unidos aún no quiere poner fin a su guerra más larga", reza la declaración, y promete que el Talibán "seguirá combatiendo por un Afganistán libre de "invasores estadounidenses".