El atleta cubano nacionalizado español Orlando Ortega afirma en una entrevista al diario Las Provincias que no desea robarle el puesto a nadie, después de que días atrás un grupo de deportistas de este país enviara una carta a la Federación de Atletismo pidiendo que cesen las nacionalizaciones, más concretamente para los vallistas.
Ortega, que posee la mejor marca del año en 110 metros vallas (12.94), adquirió la nacionalidad española por carta de naturaleza otorgada por el Consejo de Ministros de España, junto a los también cubanos Yidiel Contreras y el recordista mundial de salto de altura ya retirado Javier Sotomayor. En la entrevista con este medio declara que su objetivo es "estar bien conmigo mismo, darle las gracias a España por la oportunidad que me ha dado y darle muchos títulos".
También se refiere al grupo que envió la carta y les envía un mensaje: "No preocuparos por otros atletas, preocuparos por entrenar por vuestros objetivos". Recuerda, además, que "en Cuba tuve que correr contra los mejores y siempre perdía. Me di cuenta de que para ser el mejor tienes que correr contra los mejores. El que quiera tener una experiencia conmigo, conversar, entrenar, yo estoy dispuesto. No le doy la espalda a nadie, ni me creo más alto que nadie. Soy una persona normal. No vengo a robarle el trabajo a nadie".
Ortega, que espera jurar la Constitución Española pronto y poder competir con esa camiseta el 3 de septiembre, cuenta en Las Provincias que salir de Cuba "no fue una decisión que tuviera que pensar mucho. Un día me levanté y lo decidí". Tras ser sancionado por no ir a una competencia optó por otro camino: "Llegué a Moscú (Mundial de 2013) y no pasé de las series. Entonces me vine a España", asegura.
Después de dos años de espera, que califica de "largos y duros pero no difíciles", este vallista nacido en Artemisa dice que está "orgulloso y no me arrepiento de nada" porque son "decisiones que hay que tomar". Aunque desea vivir en España, también reconoce que "todo cubano que deserta piensa cuándo puede regresar. Aún no me he creado ese tormento de querer volver. Pero no quiero que sea una obsesión. El día que vuelva, bienvenido".
Cubanos que han triunfado como españoles
El asunto de las nacionalizaciones, no sólo a cubanos sino a todos los extranjeros, está cobrando relevancia en los medios españoles en los últimos días por el elevado número de naturalizaciones. En ese sentido, el diario El País recoge la opinión de Gerardo Cebrián, jefe de comunicación de la Federación Española de Atletismo (RFEA), quien reconoce que no siempre se hacen por la vía rápida y con el objetivo de conseguir medallas como es el caso de Ortega.
Este portavoz afirma que "por ejemplo, Joan Lino (bronce en Atenas en salto de longitud) tardó ocho años en nacionalizarse. No sabemos por qué unos casos van rápidos y otros lentos. No depende de nosotros, sino del Gobierno".
Sin embargo, en 2015 España batió el récord de nacionalizaciones por carta de naturaleza (otorgada directamente por el Consejo de Ministros) con 10 deportistas, especialmente de atletismo, donde este país no consigue una medalla olímpica desde los Juegos de Atenas en 2004. Según el Código Civil español, este tipo de nacionalizaciones se otorgan "por Real Decreto, de forma discrecional, por circunstancias excepcionales", aunque no trascienden los criterios para acogerse a estas opciones.
Entre los atletas cubanos que se hicieron españoles en los últimos años y que triunfaron con la camiseta española, además de Joan Lino (2004), que consiguió el bronce en salto de longitud en Atenas y el oro en el Europeo de pista cubierta de 2005; también figura Niurka Montalvo (1999), oro en el Mundial de ese mismo año en Sevilla y bronce en los de 2001 en Edmonton (Canadá).
Entonces, Alberto Juantorena llegó a decir: "¿De verdad el atletismo español siente como un éxito el título mundial de Niurka Montalvo en Sevilla?", en vista de la larga lista de cubanos que habían desertado y triunfaban por el mundo.
La última de las nacionalizaciones que se han dado a conocer es la del discóbolo Lois Maikel Martínez, que representó a Cuba en los Juegos de 2004, y que después de residir por muchos años en España juró recientemente la Constitución por el proceso ordinario.