Vicyohandri Odelín lanzó de manera dominante y Villa Clara aprovechó los errores de la defensa rival para obtener su primera victoria en la Serie del Caribe de Béisbol 2014, dos carreras por una sobre Indios de Mayagüez (Puerto Rico).
Aunque la alineación entregada a la prensa televisiva en la isla venezolana de Margarita daba como abridor por Cuba a Freddy Asiel Álvarez, fue Odelín quien se trepó a la lomita. Los primeros minutos del camagüeyano parecían presagiar allí el cuarto revés en línea de Villa Clara: con dos outs en la pizarra, Edwin Rosario disparó un jonrón por la banda derecha, y a seguidas Ramón Castro agregó un biangular.
Pero Odelín completó la entrada… y el juego, sin conceder más libertades. Cuba empató 1-1 en el propio primer inning, cuando el jardinero izquierdo boricua no pudo retener la línea de Alfredo Despaigne, con corredor en tercera.
Se planteó entonces un duelo de lanzadores, porque el ex Grandes Ligas Joel Piñeiro hizo igualmente bien el trabajo. Pero la marca decisiva cristalizó en el séptimo, por otras dos pifias del infield boricua que malograban el esfuerzo de su tirador.
Odelín trabajó minuciosamente en su partido de tres boletos y cinco ponches, con 132 lanzamientos, de ellos 81 strikes. Piñeiro tiró 101 pelotas (71 en la zona buena) y Steve Smith retiró 1,1 innings como sustituto por los derrotados.
Villa Clara acumuló ocho hits, dos de los cuales de Yulexis la Rosa y ningún bateador suyo remolcó carrera; los puertorriqueños (Indios de Mayagüez) pegaron sus dos batazos en la entrada inicial y cometieron los tres errores del encuentro.
Este miércoles juega Venezuela (Navegantes del Magallanes) frente a Puerto Rico, y un triunfo de los boricuas (1-2) les concedería automáticamente el boleto a la semifinal de cuatro equipos. También se enfrentan Tigres del Licey (República Dominicana) vs. Naranjeros de Hermosillo (México); Cuba, que concluyó con 1-3 la primera parte del calendario, ocupará las gradas a la espera de un milagro.
Aunque la alineación entregada a la prensa televisiva en la isla venezolana de Margarita daba como abridor por Cuba a Freddy Asiel Álvarez, fue Odelín quien se trepó a la lomita. Los primeros minutos del camagüeyano parecían presagiar allí el cuarto revés en línea de Villa Clara: con dos outs en la pizarra, Edwin Rosario disparó un jonrón por la banda derecha, y a seguidas Ramón Castro agregó un biangular.
Pero Odelín completó la entrada… y el juego, sin conceder más libertades. Cuba empató 1-1 en el propio primer inning, cuando el jardinero izquierdo boricua no pudo retener la línea de Alfredo Despaigne, con corredor en tercera.
Se planteó entonces un duelo de lanzadores, porque el ex Grandes Ligas Joel Piñeiro hizo igualmente bien el trabajo. Pero la marca decisiva cristalizó en el séptimo, por otras dos pifias del infield boricua que malograban el esfuerzo de su tirador.
Odelín trabajó minuciosamente en su partido de tres boletos y cinco ponches, con 132 lanzamientos, de ellos 81 strikes. Piñeiro tiró 101 pelotas (71 en la zona buena) y Steve Smith retiró 1,1 innings como sustituto por los derrotados.
Villa Clara acumuló ocho hits, dos de los cuales de Yulexis la Rosa y ningún bateador suyo remolcó carrera; los puertorriqueños (Indios de Mayagüez) pegaron sus dos batazos en la entrada inicial y cometieron los tres errores del encuentro.
Este miércoles juega Venezuela (Navegantes del Magallanes) frente a Puerto Rico, y un triunfo de los boricuas (1-2) les concedería automáticamente el boleto a la semifinal de cuatro equipos. También se enfrentan Tigres del Licey (República Dominicana) vs. Naranjeros de Hermosillo (México); Cuba, que concluyó con 1-3 la primera parte del calendario, ocupará las gradas a la espera de un milagro.