En Cuba el fútbol gana cada vez más adeptos. Sus indumentarias, como trajes, banderas, bufandas, todo tipo de iconografía en jarros, etc, comienzan a colmar varios negocios de La Habana. La mayoría prefiere coleccionar artículos de ídolos como Messi o Cristiano Ronaldo, así como de clubes como el Barcelona o el Real Madrid.
Una de estas pequeñas microempresas es Alljersey. La misma se dedica a la venta de camisetas de fútbol. Según su fundador, el joven Jorge Ariel Fuentes, todos sus productos son completamente originales y de alta calidad.
Jorge Ariel nos cuenta: “Alljersey se apoya en la página de clasificados Revolico, donde semanalmente insertamos el anuncio. Así empezaron a llegar nuevos interesados en invertir en este negocio. Pasados unos seis meses, ya teníamos una red de distribución en la Habana. Con esto me refieroa: compradores fijos y revendedores de los encargos mensuales.”
Fuentes comenta que funcionan por encargo. “Contamos una proyección lenta pero segura. Los clientes fijos nacionales mandan a pedir lo que saben que venderán con exactitud. Los precios iniciales son así: camisetas a 35 CUC, enguatadas, shorts y pullovers a 40, y si le sumas un par de media el paquete es en 50. Cada distribuidor nuestro se gana en cada venta mensual entre 1000, 1500 CUC, pues a cada implemento le ganan de 10 a 20 CUC.”
¿Qué tiempo demora el proceso de encargo/compra y venta?
“El pedido se envía vía email a Miami. Allá el proveedor manda los paquetes postales en un plazo de 15 a 21 días a las puertas de la casa de los distribuidores. Todo el proceso cíclicamente dura entre 1 mes a 45 días.”
Cafeterías vestidas de fútbol
La cafetería ” 90 min”, ubicada en la Avenida Carlos Tercero, se engalana con muchas prendas de equipos de fútbol, para atraer a aficionados del deporte.
Eugenio Morales, un cliente asiduo, comentó: “La idea fue de la hija de la dueña, ella reside en España. Ya sabes, invirtió 2000 euros en la decoración del local. Ha sido todo un éxito, vienen muchos clientes que son seguidores del futbol y la garantía es la buena calidad de los servicios, entre ellos servicio a domicilio.”
Luego encontramos el bar-restaurante “GolBar”, en el Vedado.
Una camarera, que no se identificó, explicó: “La idea de GolBar es del hijo de la dueña. El muchacho exporto toda la decoración desde Ecuador, la inversión fue de 1500 dólares, ¡pero mira qué maravilla!”
Un cliente italiano, de nombre Marcelo Viccini, nos dijo: “Soy un fan de este lugar, aquí todo es de primera calidad. Cada vez que vengo de Italia, este es mi lugar predilecto para cenar.”
En otra mesa una pareja identificada como Maikol Muñoz y Sandra Fonseca añadieron: “Somos fanáticos del Real Madrid, y qué mejor lugar para comer que aquí, donde están concentrados todos los símbolos del fútbol que nos gusta. Los precios son módicos, no nos podemos quejar.”
Sin dudas el fútbol es una mina de oro por explotar en la Isla, garantía de inversión segura y próspera.
Este artículo fue publicado originalmente en Cubanet por Isis Márquez.