Mientras algunos de sus compañeros en los jardines de los Dodgers están descansando para recuperarse de lesiones menores, el cubano Yasiel Puig trabaja esta pretemporada en busca de recuperar su puesto.
Las acciones del jardinero derecho, todo un fenómeno cuando debutó en las mayores en 2013, han perdido valor en las últimas temporadas, y Puig incluso fue enviado a las menores en agosto del año pasado.
"Me estoy preparando cada día para tener una buena temporada y ayudar a mi equipo, y para preservar mis amistades", dijo Puig tras jugar cinco y medio innings el miércoles en un partido de pretemporada.
Puig era considerado como una superestrella del futuro, un jugador con una personalidad efervescente, potencia en el bate y un cañón en el brazo.
Debutó en las Mayores a los 22 años y se apoderó de la titularidad en el jardín derecho tras ser ascendido de las menores a principios de junio de 2013. Esa campaña bateó .319 con 19 jonrones en 104 partidos, y agregó 13 hits en la postemporada.
Al año siguiente, fue elegido al Juego de Estrellas, y parecía encaminarse a codearse con los grandes. Pero luego empezó a mermar su producción, tuvo algunos encontronazos con compañeros que arrojaron dudas sobre su madurez, y tuvo lesiones en 2015 y 2016. Los Dodgers se hartaron el año pasado, y lo mandaron a Triple-A en agosto.
Puig perdió su posición cuando los Dodgers adquirieron a Josh Reddick en un canje. Ahora que Reddick se fue a Houston, el cubano tiene la oportunidad de volver a jugar a diario, y ha sido utilizado más mientras Andre Ethier, Andrew Toles y Trayce Thompson se recuperan de algunas dolencias.
Puig admitió antes de estos campos de entrenamiento que él es el único culpable por su comportamiento. Dijo que este año está más enfocado e incluso entiende la razón por la que fue enviado a las menores.
"Fue difícil, pero hay que seguir trabajando. El pasado es el pasado, y no estoy pensando en eso", afirmó. "Sigo feliz por estar con este equipo, y quiero ayudarlo a ganar la Serie Mundial".
Los Dodgers podrían decidir usar una combinación de varios jugadores en el jardín derecho, alternando entre Puig, Toles, Ethier o Franklin Gutiérrez. Pero el manager Dave Roberts está contento con lo que ha visto hasta ahora del cubano.
"En cuanto al camerino, ha hecho todo lo que se supone que haga. Está haciendo lo mismo que los demás, trabajando duro, preparándose", dijo Roberts.
(Con información de Prensa Asociada)