La bloguera Yoani Sánchez escribió un artículo en su blog "Generación Y", donde hace una radiografía de la "nueva recaída económica" en Cuba, resultado de una improductividad soportada por décadas, dependiente de los subsidios extranjeros y recostada en la incapacidad de un modelo económico de generar eficiencia y bienestar.
Bajo el título, "Un país pendiente de un barco", Yoani dibuja el acontecer diario de los cubanos soportando colas más largas y caras más tristes; platos más vacíos y gente sumida en la desesperanza.
Dice que todo lo anterior influye en un aumento del número de personas que buscan hacer maletas, aunque el éxodo ha sido un testigo inseparable de la vida nacional cubana.
Anota Yoani Sánchez que a pesar de la "Revolución Energética", Cuba es ahora más dependiente de los combustibles fósiles de lo que fue hace diez años. "Basta que un tanquero de petróleo se retrase y todo el país se queda paralizado, en pausa, hasta que arribe el próximo barco".
Explica que la decadente economía venezolana ha contribuido a estos retrasos en la entrega del "oro negro", sumado a las drásticas medidas tomadas por Washington para evitar que el gobierno paralelo de Caracas siga subsidiando a La Habana.
La bloguera expone una cruda realidad que para 11 millones de personas es una imperiosa necesidad: aferrarse a que un barco lleve petróleo venezolano a la isla, para no "naufragar" en la angustiosa espera.