Los uruguayos deberán decidir en segunda vuelta si devuelven el poder a la izquierda tras cinco años de ausencia o mantienen al oficialismo en el gobierno.
En medio de una gran apatía, el voto de los indecisos será clave tanto para la izquierda, que aspira a volver al poder después de perderlo en 2019, como para el oficialista Partido Nacional.