La caída de la producción de petróleo en Venezuela, unida a sus problemas financieros, le hacen cada vez más difícil mantener a flote un programa de asistencia a su aliado más cercano, Cuba, establecido hace 15 años, indica un informe de Reuters.
La estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) ha reducido este año sus exportaciones a la isla de gobierno comunista, según datos comerciales internos de la empresa visto exclusivamente por esa agencia de prensa.
La caída de la producción llevó a un cambio en la diplomacia petrolera que fundó el fallecido líder socialista Hugo Chávez, y ayuda a explicar por qué Cuba, que genera electricidad a partir de combustibles, recientemente ordenó a algunas empresas mixtas y firmas de propiedad estatal reducir su consumo de energía.
Cuba, que recibe un 4 por ciento de las exportaciones totales petroleras de Venezuela, ha sido el mayor beneficiario de estos programas.
También se produce en paralelo a la mejora de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos tras décadas de antagonismo, mientras Venezuela, sumida en escasez y con una inflación de tres dígitos, se encuentra en un prolongado punto muerto con Washington.
Cuba, que por mucho tiempo ha dependido de Venezuela como su principal proveedor energético, ha recibido este año unos 53.500 barriles por día (bpd) de crudo de PDVSA, un descenso del 40 por ciento versus el primer semestre de 2015, según datos de la compañía.
Durante los años en que disfrutó de un ingente auge petrolero con precios del crudo en niveles récord, el gobierno socialista de Venezuela pavimentó parte de su apoyo político en América Latina y el Caribe mediante el envío de petróleo en condiciones ventajosas a sus principales aliados.
Cuba, que recibe un 4 por ciento de las exportaciones totales petroleras de Venezuela, ha sido el mayor beneficiario de estos programas. La isla había permanecido al margen de los crecientes problemas financieros y operacionales de PDVSA, que desde 2015 han puesto en jaque el suministro de crudo a Uruguay, Jamaica, República Dominicana y Curazao.
Aún en medio de dificultades, Venezuela ha tratado de compensar el declinante envío de crudo a Cuba con mayores exportaciones de productos refinados como fuel oil, diesel y gaslicuado de petróleo (GLP), según muestran las cifras. Pese a los esfuerzos, los despachos totales a ese país, incluyendo crudo y productos, se redujeron un 19,5 por ciento a83.130 bpd en el primer semestre de este año.
No está claro si Cuba está tratando de asegurar nuevas fuentes de suministro en medio del déficit. El pacto de intercambio de petróleo venezolano por servicios profesionales cubanos ha dado un gran impulso a la economía de la isla, que tendría que pagar mucho más si decidiera comprar crudo en el mercado abierto.
Mientras tanto, PDVSA ha estado luchando por limitar sus propias compras de costosos crudos y nafta, necesarios para diluir el crudo extra pesado de la Faja Orinoco, y está optando por mantener en casa una mayor porción de un crudo mediano conocido como Mesa 30, que puede usar como diluyente.
Venezuela ha tratado de compensar el declinante envío de crudo a Cuba con mayores exportaciones de productos refinados como fuel oil, diesel y gaslicuado de petróleo (GLP)
Mesa 30 ha sido durante mucho tiempo el principal crudo recibido por Cuba. El petróleo venezolano que está llegando ahora es más pesado y, por tanto, más difícil de refinar en las plantas cubanas para producir la mezcla ideal de combustibles que necesita su economía, según una fuente de la comisión mixta Cuba-Venezuela que supervisa los tratados.
Venezuela tiene las mayores reservas de crudo del mundo, aunque la producción ha disminuido en los últimos años en medio de una prolongada desinversión atizada por la caída de los precios del petróleo y una profunda crisis económica en el país.
Numerosos analistas creen que la extracción de petróleo del miembro de la OPEP caerá este año a su nivel más bajo desde la devastadora huelga que afectó a PDVSA entre 2002 y 2003.
Declinan los ingresos a Maduro
PDVSA dijo este mes que sus ingresos por ventas cayeron más de un 45 por ciento en 2015. Pese a la trayectoria de Venezuela como oportuna pagadora de su deuda externa, hay una creciente preocupación entre los inversores de Wall Street sobre si el país y la empresa serán capaces de cumplir este año los compromisos con sus tenedores de bonos.
El pacto de intercambio de petróleo venezolano por servicios profesionales cubanos ha dado un gran impulso a la economía de la isla, que tendría que pagar mucho más si decidiera comprar crudo en el mercado abierto.
El ministro de Petróleo, Eulogio Del Pino, dijo que no ha habido una disminución significativa en la producción, pero el promedio se aleja cada vez más de un pico de 3,24 millones de bpd en 2008. En mayo, Venezuela reportó a la OPEP un bombeo de 2,37 millones de bpd.
PDVSA no respondió a una solicitud de comentarios.
Algunos de los crudos medianos y ligeros que PDVSA ha importado a través de su terminal Bullenbay en el Caribe han ido a parar a Cuba, según los datos internos de PDVSA. En 2015, PDVSA envió a Cuba 2,6 millones de barriles de crudos Girassol de Angola y Urales de Rusia. Este año, la firma ha optado por enviarle variedades venezolanas más pesadas, como Leona y crudo diluido (DCO).
Un menor suministro venezolano también significa que Cuba tendrá poco o ningún excedente de productos petroleros para exportar, como lo ha hecho en el pasado.
"Cuba ha sido capaz de producir un excedente de gasolina y jet fuel para exportar al mercado internacional y generar moneda fuerte", dijo Jorge Piñón, director del programa de América Latina y el Caribe de la Universidad de Texas en Austin. "No podrá darse ese lujo una vez que tenga que pagar el crudo en efectivo".
Disminuye venta de crudo a EEUU.
También bajaron las exportaciones de crudo venezolano a EEUU en un 14 % durante el mes de junio en comparación con mayo.
PDVSA compró este mes diluyentes para elaborar mezclas de crudo exportables, según datos de Thomson Reuters sobre flujos comerciales y operadores del mercado.
En los últimos años PDVSA ha estado importando crudo ligero y nafta para diluir su producción de petróleo extra pesado y crear mezclas de crudos que puedan ser enviadas a sus clientes en Estados Unidos y otros países.
Problemas con los pagos han generado retrasos en la descarga de crudo y productos importados en los últimos meses, lo que se suma a la declinante producción petrolera de Venezuela.
PDVSA envió el mes pasado 652.730 barriles de crudo por día (bpd) a Estados Unidos en 39 cargamentos, según los datos. La refinadora estadounidense Phillips 66 fue la mayor receptora, seguida por Citgo Petroleum, el brazo refinador de PDVSA.
Los embarques que arribaron en junio también representaron una caída del 4 por ciento en comparación con el mismo mes del 2015.
Las exportaciones han declinado en consecuencia y también por los problemas de liquidez de PDVSA que han afectado sus pagos a proveedores.
En junio, PDVSA entregó más crudo a compradores ocasionales incluyendo Lukoil Panamericas y Axeon Specialty Products, según los datos, que fueron elaborados con cifras preliminares.