El asesor adjunto de Seguridad Nacional del presidente Barack Obama, Ben Rhodes, asistirá al funeral de Fidel Castro en representación de Estados Unidos, pero Washington no enviará una "delegación oficial", comunicó este martes la Casa Blanca.
El portavoz presidencial, Josh Earnest, anunció en conferencia de prensa que Estados Unidos estará representado por Rhodes y por Jeffrey DeLaurentis, nominado por Obama para embajador en La Habana.
Rhodes lideró las negociaciones para la normalización de las relaciones diplomáticas y comerciales entre los dos países, que iniciaron el 17 de diciembre de 2014.
Earnest había adelantado el lunes, durante su encuentro diario con la prensa, que ni Obama ni el vicepresidente Joseph Biden viajarían a Cuba para asistir al funeral del exgobernante cubano, fallecido el pasado viernes, 25 de noviembre.
El vocero de la Casa Blanca dijo, además, a los periodistas que el impacto económico del acercamiento diplomático con Cuba ya está en marcha, y que cualquier medida contra los avances hechos en la normalización de relaciones durante los últimos dos años "asestará un significativo golpe económico" al pueblo cubano.
En una serie de mensajes publicados en su cuenta de Twitter, Rhodes recalcó la importancia del deshielo con Cuba tanto para los ciudadanos de la isla como para los estadounidenses.
