Funcionarios de la oficina de atención a la ciudadanía del Consejo de Estado expulsaron de sus predios a Rosa María Rodríguez, representante del Movimiento Cristiano Liberación en la Habana, adonde acudió para indagar sobre una petición de libertad para el prisionero de conciencia Eduardo Cardet, respaldada por 10 mil firmas de cubanos en la isla.
Rodríguez dijo a Radio Martí que aunque haya sido sacada por la fuerza del lugar, seguirá haciendo valer sus derechos ciudadanos.
La activista dijo que un guardia de seguridad la agarró por la muñeca y casi la arrastró fuera del lugar. "Me dijo: 'aquí no te queremos más, y cuando vuelvas a venir vamos a tomar otro tipo de medidas contigo'".
Las autoridades habían dicho a Rodríguez que revisarían la petición de libertad para Cardet, y que darían una respuesta en 60 días hábiles.
En junio pasado, Amnistía Internacional lanzó otro llamado de Acción Urgente a favor de Cardet, encarcelado en la prisión de Cuba Sí, en la provincia de Holguín, donde permanece sin derecho a visitas familiares por un período de seis meses.
El médico está en prisión desde el 30 de noviembre de 2016, condenado a tres años de cárcel por el supuesto delito de "atentado a la autoridad".
Rodríguez, miembro del Consejo Coordinador del MCL, es la encargada de la recogida de firmas en La Habana para la campaña "Un cubano, un voto", con la que el movimiento pretende impulsar una transición a la democracia desde la legalidad vigente en Cuba.
En entrevista con el sitio Alfa y Omega, Rodríguez explica en qué consiste la campaña, y como los activistas que la impulsan dentro de la isla son perseguidos y acosados por parte de las autoridades.
(Con reporte de Dámaso Rodríguez y archivo Martí Noticias)