Tres asociaciones en Europa han alertado a los eurodiputados miembros de las Asambleas Parlamentarias Euronest y Eurolat sobre la gravedad de las declaraciones del gobierno ruso acerca de la posibilidad de que el Kremlin despliegue fuerzas militares en territorios de Cuba y Venezuela.
El viceministro ruso de Exteriores, Sergei Ryabkov, dijo el jueves pasado en declaraciones televisadas que no podía confirmar ni excluir la posibilidad de que Rusia estableciera infraestructura militar en Cuba y Venezuela, ante la negativa de Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de ceder a los requerimientos de Moscú de que se prohiba que Ucrania ingrese a la OTAN.
La misiva fue firmada por la escritora y activista cubana residente en Francia, Zoé Valdés, como delegada del Movimiento Libertario Republicano Martiano; la Dra. Marta Barandiy, presidenta de Promote Ukraine, organización que promueve la integración de Ucrania a la Unión Europea; y Patricia Betancourt, presidenta de VenEuropa ASBL, que impulsa las relaciones entre Europa y Venezuela.
El texto menciona que la población de Ucrania, Cuba y Venezuela "va a ser víctima segura, sea cual sea la resolución del conflicto".
“Europa ha permitido la injerencia rusa en América Latina y ha desoído el clamor de quienes, como nosotros, han denunciado en reiteradas ocasiones esta intrusión ilícita”, denuncian las firmantes.
"Esta perversa triangulación de la guerra con Ucrania sienta un precedente extremadamente peligroso y deja para siempre una puerta abierta a la extorsión terrorista de una potencia armamentística como Rusia, de la que puede llegar a ser rehén cualquier país del mundo, como lo son ahora Ucrania, Cuba y Venezuela", alertan en la carta.
Desde París, Zoé Valdés dijo a Radio Martí que este asunto debería tenerlo en cuenta también el gobierno norteamericano.
"Cuba se presta para un enfrentamiento militar y esto ya daría a consideraciones más importantes con relación a Estados Unidos y el régimen de Castro y el régimen venezolano”, opinó la escritora.
Radio Martí también pudo conversar con Patricia Betancourt, presidenta de la ONG VenEuropa, quien expresó que desde hace ya un año, su agrupación viene denunciando esa presencia y alertando que cosas como esta podrían suceder.
"Nuestra pregunta es: si esto estuviera pasando en un país de la Unión Europea, ¿qué habrían hecho?”, cuestionó Betancourt.
A continuación, el texto íntegro de la carta divulgada en el periódico digital ZoePost.
“Como representantes de una parte de la sociedad civil ucraniana, cubana y venezolana y ante la amenaza de la Federación rusa de enviar soldados a Cuba y Venezuela -a modo de extorsión para la no aceptación de Ucrania en la OTAN -nosotros, líderes de asociaciones civiles con sede en la Unión Europea, nos dirigimos a usted para manifestarle nuestra inquietud por lo que entendemos que significa el simple hecho de que esta amenaza haya sido proferida.
Con absoluta independencia de la trascendencia global de esta contienda geopolítica hay un hecho indiscutible y es que la población de los tres citados países va a ser víctima segura, sea cual sea la resolución del conflicto. Rusia está fabricando pretextos para la invasión a Ucrania, utilizando su ya conocida presencia militar en Cuba y Venezuela para volver a la retórica de la Guerra Fría y a la arquitectura de Seguridad que imperaba antes de la Cumbre de Madrid de 1997.
Europa ha permitido la injerencia rusa en América Latina y ha desoído el clamor de quienes, como nosotros, han denunciado en reiteradas ocasiones esta intrusión ilícita. Las recientes, amenazadoras y descaradas declaraciones públicas del Vicecanciller ruso Serguei Ryabkov, no han hecho si no confirmar que nuestras denuncias estaban bien fundadas.
¿Qué postura va adoptar la UE respecto al evidente problema que supone la permanencia de efectivos militares rusos en América Latina?
Esta perversa triangulación de la guerra con Ucrania sienta un precedente extremadamente peligroso y deja ara siempre una puerta abierta a la extorsión terrorista de una potencia armamentística como Rusia, de la que puede llegar a ser rehén cualquier país del mundo, como lo son ahora Ucrania, Cuba y Venezuela.
Estamos a su disposición para concertar un encuentro en el que tratar más ampliamente este tema y colaborar en el esbozo de las posibles acciones a emprender.
A la espera de conocer su opinión al respecto, reciba nuestros más considerados saludos.