Personas allegadas al padre Castor José Álvarez Devesa, abiertamente crítico al régimen de La Habana y quien ha dado respaldo a la oposición cubana en numerosas ocasiones, están preocupados porque la Seguridad del Estado pudiera sacar provecho de su condición de salud.
La publicación independiente La Hora de Cuba alertó que su ingreso por coronavirus "se produce en un contexto complicado en la provincia de Camagüey, que mantiene resultados superiores a los 30 casos diarios desde semanas atrás, y ha disparado las alarmas alrededor de los amigos y familiares del sacerdote, por el temor a que su estancia en el hospital sea aprovechada por la Seguridad del Estado para ocasionarle un daño mayor”.
“Castor, quien tiene 49 años de edad, fue expulsado de los estudios de Matemáticas en la Universidad de Oriente por "problemas políticos", tras lo cual ingresó en la enseñanza sacerdotal. Su labor como párroco en diferentes comunidades (Elia, Chambas, Florida, Nuevitas y la actual, el reparto Modelo de la ciudad de Camagüey) la ha combinado con una cercanía notable a personas perseguidas por el estado en razón de sus ideas políticas”, explica el periodista Henry Constantin.
Por otra parte Osvaldo Gallardo González ofreció en redes sociales más detalles sobre la situación de salud que padece el cura.
“El padre Castor Álvarez ha dado positivo al Covid 19, en un segundo PCR, luego de haber estado hospitalizado con un PCR negativo... Sabemos de su audacia profética y de su posición frontal frente a la falta de los derechos más elementales en nuestra Patria. Estando en manos del sistema cubano de salud corre peligro porque es alguien molesto para el régimen. Recordemos que desde la Oficina de Asuntos Religiosos del Partido Comunista de Cuba se han dado órdenes de silenciar a sacerdotes como él. Ellos serán los responsables si algo ocurre al P. Castor. Pedimos a todos rezar por este valiente sacerdote y estar muy atentos!”.
En 2018 el sacerdote firmó, junto a los también curas José Conrado Rodríguez y Melvis Roque, una carta dirigida a Raúl Castro en la denunciaban que la necesidad urgente de celebrar elecciones libres; en julio de 2017, había ido a oficiar una misa a la sede de las Damas de Blanco, recuerda La Hora de Cuba.
"En el pasado mes de diciembre, fuentes de la Iglesia Católica que pidieron mantenerse en el anonimato revelaron que la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (organismo encargado de controlar las iglesias y actividades religiosas en Cuba) había hecho llegar a la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba una lista con los nombres de cinco sacerdotes en la isla, que estaban “en la mirilla” de las autoridades, por sus posturas cívicas. Uno de ellos, precisamente el Padre Castor", denunció Henry Constantín.
Castor es firmante de varias cartas que en los últimos meses han criticado abiertamente la difícil realidad de Cuba.