La policía política allanó el viernes las casas de dos activistas del Movimiento Opositor Juventud Despierta que se ocupaban, a través del proyecto humanitario Armando Sosa Fortuny, de entregar alimentos a familias que no deben salir a las calles para no exponerse al contagio de la COVID-19.
Yoel Bravo López, líder de ese grupo opositor dijo Radio Televisión Martí que los activistas Luis Navarro Blanco y de Alejandro Suárez fueron arrestados después que sus casas fueran allanadas.
Desde la pasada semana, ambos llevaban diariamente la comida que elaboraban en sus viviendas a familias que por razones de salud no deben exponerse al contagio.
La policía les quitó los utensilios que usaban para la elaboración de la comida, además de medicinas, computadoras, impresoras y otros materiales de oficina requeridos para nuestro activismo, relató Bravo, quien en su perfil de Facebook publicó una lista de todo lo confiscado.
Según Bravo, este sábado en la mañana, un oficial de la Seguridad del Estado que se hace llamar Daniel, lo citó a una estación de Policía y le dijo que lo acusarían de "propagación de epidemia si continuaban repartiendo comida a los ancianos y convocando al pueblo a la rebeldía".
Afirmó que "lo que hacemos en medio de esta crisis es apoyar a las personas que el régimen ha dejado desamparadas".
El proyecto Armando Sosa Fortuny comenzó a funcionar en Santa Clara, provincia de Villa Clara, el pasado 3 de abril, en medio de la emergencia comunitaria por el brote del coronavirus en la isla.