Una autoridad carcelaria prometió a la esposa del preso político y líder del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Eduardo Cardet, que no se repetirá la golpiza que le propinaron reos de la prisión Cuba Sí, de Holguín, donde cumple su condena de tres años el opositor cubano.
El ataque contra Cardet denunciado por familiares se produjo el 19 de diciembre, día en que fue trasladado desde la Prisión Provisional de Holguín al centro penitenciario Cuba Sí, situado en la misma provincia. Las razones del traslado no han sido aclaradas.
El funcionario que no fue indentificado explicó a Yaimaris Vecino, -esposa de Cardet-, que el opositor no tuvo responsabilidad alguna en el ataque que le dejó golpes en la cabeza y el abdomen.
"El jefe de la prisión (...) reconoció que un recluso con problemas psiquiátricos, eso fue lo que nos dijo, había sido el que lo había agredido, cosa que no es así, (porque) fueron tres", aseguró Vecino quien se reunió el jueves con "el reeducador".
"Dijo que eso no iba a volver a ocurrir y que Eduardo no había tenido problemas de conducta ni nada que hubiese propiciado este ataque (...) él no tuvo ninguna responsabilidad", expresó Vecino, también médico de profesión.
Durante la visita realizada el jueves, la esposa de Cardet pudo ver a uno de los agresores en el mismo salón donde se dan los encuentros entre prisioneros y sus familiares.
Vecino comprobó que Cardet se recupera: "Está mejor de los golpes, ya no tiene señales visibles de los golpes en el área del cráneo, lo que sí tiene es las dos cicatrices de las heridas que le propinaron ahí en el abdomen".
La hermana de Cardet, -comentó Vecino días atrás-, había presentado una denuncia sobre la agresión ante la Fiscalía de La Habana pero hasta el momento no ha recibido respuesta alguna.
Cardet fue detenido en Holguín el 30 de noviembre de 2016, cinco días después de la muerte del exmandatario Fidel Castro. Un tribunal lo acusó del supuesto delito de "atentado" contra un funcionario del Estado al momento de la violenta detención.
Testigos y familiares sostienen que la acusación es falsa. Aún así jueces lo sancionaron a tres años de cárcel.
Esta semana la organización Amnistía Internacional llamó a una nueva acción urgente tras el incidente, en que insta al gobierno comunista a liberar "de inmediato y sin condiciones" al médico opositor.
(Con reporte de Ivette Pacheco)