La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió el lunes iniciar una investigación independiente sobre las muertes ocurridas durante violentas protestas en Chile el fin de semana, y mencionó "perturbadoras" acusaciones de uso excesivo de fuerza militar.
En un comunicado desde la sede de su despacho en Ginebra, la expresidenta chilena instó al diálogo inmediato entre las partes para detener "la retórica inflamatoria".
"Es esencial que todos los actos que han provocado lesiones y muerte, tanto por parte de las autoridades como de los manifestantes, sean sometidos a investigaciones independientes, imparciales y transparentes", sostuvo Bachelet, quien tuvo dos mandatos como presidenta en la nación sudamericana.
Bachelet no hizo referencia explícita a su sucesor, el presidente Sebastián Piñera, pero en su declaración instó a laspartes a entablar un diálogo inmediato.
"Las autoridades deben actuar en estricta conformidad con los estándares internacionales de derechos humanos. Cualquier aplicación del estado de emergencia debe ser excepcional y en base a la ley", afirmó.
La noche del domingo, Piñera dijo que su Gobierno extendería el estado de emergencia en varias ciudades del país, incluyendo la capital Santiago, y sostuvo que Chile estaba "en guerra contra un enemigo muy poderoso", en declaraciones que resultaron polémicas en la opinión pública.
Autoridades locales dijeron el lunes que la cifra de muertos por los disturbios durante el fin de semana en Chile subió a 11 personas, luego de un recrudecimiento de la violencia y el vandalismo en la capital a pesar de una orden de toque de queda en las últimas dos noches.