El gobierno cubano autorizó las operaciones de las aerolíneas American Airlines y JetBlue para iniciar los vuelos regulares a Cuba, asegura el diario The Miami Herald.
JetBlue tiene previsto volar el 31 de agosto y para ello ha desplegado una fuerte campaña publicitaria que incluye boletos a 99 dólares.
La aerolínea comenzará a volar desde el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale hasta el aeropuerto internacional Abel Santamaría de Villa Clara, una terminal fundamental para conectar al polo turístico Cayo Santa María, en islotes arenosos del nordeste de Villa Clara.
American iniciará operaciones una semana después de JetBlue y tiene en planes dos vuelos diarios a Holguín, Santa Clara y Varadero y un vuelo diario a Camagüey y Cienfuegos. Esta compañía tiene permiso del gobierno cubano para aterrizar en cinco aeropuertos. En total estaría ofreciendo 56 vuelos semanales a Cuba.
"Desde que a American le asignaron en junio pasado servicios regulares a Cuba, nuestro equipo ha estado trabajando duro para asegurar que estamos listos para Cuba", aseguró en un comunicado Art Torno, vicepresidente sénior de American Airlines (AA).
Estos vuelos hacen parte de un total de 110 aprobados por el Departamento de Transporte de EE.UU. (DOT, en inglés) a aerolíneas comerciales estadounidenses para viajar a Cuba, entre ellos 90 a ciudades cubanas diferentes a La Habana, y 20 la capital de la isla, que aún esperan la autorización final.
La demora en esta autorización obedece a que las solicitudes de las aerolíneas estadounidenses para vuelos diarios a La Habana triplicaron la cifra de veinte que ambos Gobiernos acordaron.
El DOT mientras tanto, ya escogió seis aerolíneas, entre ellas AA y JetBlue, que harán noventa vuelos diarios desde cinco ciudades de EE.UU. a nueve de Cuba (excepto La Habana).
La Administración para la Seguridad en el Transporte (TSA) había advertido a mediados de julio que no permitiría los vuelos comerciales programados a Cuba hasta comprobar que los aeropuertos cubanos fueran tan seguros como los de cualquier otro país, pero recientemente TSA y las autoridades cubanas firmaron un acuerdo bilateral de seguridad en la aviación que establece el marco legal para el despliegue, a bordo de ciertos vuelos hacia y desde Cuba, de oficiales de seguridad estadounidenses (alguaciles federales aéreos).
El Departamento de Transporte de EE.UU. ha concedido aprobación preliminar para volar 20 rutas diarias a La Habana y se espera que la aprobación final se otorgue a finales de este año.