Un desconsolado jubilado del Reino Unido dijo a la prensa que a su esposa la "dejaron morir" en un hospital de Cuba porque no podían pagar una factura médica de 20.000 euros, según informa este domingo el diario Birmingham Mail.
Ray Dumbleton dijo que incluso las autoridades comunistas le prohibieron decir un último adiós a su querida Sheila, su alma gemela por 34 años, mientras su cuerpo permanecía solo en una morgue en Cuba.
El hombre de 67 años de edad, de la localidad de Frankley, dijo que esta prueba en la isla fue como "el infierno en la Tierra".
La turista británica, de 57 años de edad, que sufrió un derrame cerebral, una hemorragia en el cerebro y otras complicaciones, murió mientras estaba recibiendo tratamiento en el hospital cubano.
Ahora, su familia está angustiada por haber recibido la orden de liquidar su factura médica, además de que debe encontrar un extra de 7.000 euros para llevar a casa el cuerpo de Sheila.
"Sabemos que, tan pronto como el hospital supo que no podíamos pagar, la dejaron deteriorarse hasta morir", dijo Ray.
Agregó el hombre que "las condiciones en el hospital cubano eran terribles, algo que me resulta difícil poner en palabras. Había cadáveres descubiertos por todas partes”.
"Era como si ellos no se preocuparan por la dignidad de las personas. Ellos ni siquiera me permitieron ver el cuerpo de mi esposa y darle mis últimos respetos. Simplemente continuaron diciendo que era la ley cubana. Ellos han roto mi corazón. Me sentí impotente allí. En un punto incluso amenazaron con que me meterían en la cárcel si continuaba exigiendo para verla.
Ahora estoy feliz de estar de vuelta a casa, pero yo no puedo descansar hasta que Sheila esté de vuelta aquí con su familia”.
Sheila se convirtió en bisabuela mientras estaba en Cuba, pero nunca llegó a conocer a su primer bisnieto.
El matrimonio llegó a Holguín el pasado 6 de junio, y luego de seis días de vacaciones Dumbleton tuvo un sangramiento digestivo, fue operada de urgencia.
Dumbleton, quien al parecer había tenido antes el mismo padecimiento, no lo habría declarado al momento de la compra del seguro de viaje, por lo que la compañía aseguradora se niega ahora a pagar la factura.
“Lamentamos mucho lo ocurrido a la señora Dumbleton, pero desafortunadamente ella no reveló su historial médico a la hora de comprar el seguro de viaje, por lo que su reclamación no está cubierta”, declaró un vocero de la aseguradora White Horse Insurance Ireland.