Los cortes eléctricos en Cuba durante este verano son frecuentes y afectan tanto al sector residencial como a los establecimientos estatales, dijeron residentes en varios municipios de la isla entrevistados por Martí Noticias.
La activista Rosario Morales, residente en Cojímar, al Este de La Habana, asegura que en su localidad los apagones se dan con frecuencia y “principalmente en horario nocturno, cuando la gente está viendo la novela”.
La población se molesta porque “(los apagones) llegan sin avisar”, asegura el pedagogo matancero Arsenio López, quien cree que el fuerte calor de este verano es la razón por la que hay más incomodidad en la población.
“Cuando apagan no tienen en cuenta que hay niños y gente enferma, que sufren las afectaciones”, aseguró López.
Otro de los serios problemas que enfrentan los cubanos es que “la corriente va y viene” repetidas veces en poco tiempo, y eso daña los equipos electrodomésticos que, por demás, son muy difíciles de arreglar, advierte Yoel Almenteros, residente en el municipio de Corralillo, al Norte de Villa Clara.
El joven asegura que en la Empresa Eléctrica “lo que hay es una falta de respeto”, porque cuando la población llama a preguntar lo que ocurre, y las causas del apagón, “no les dan explicaciones”.
Cortes o interrupciones en el servicio eléctrico, que de forma reiterada se han venido produciendo en el territorio, no solo han provocado averías en equipos electrodomésticos de algunas familias, sino también afectaciones en la conservación de alimentos, trayendo como consiguiente la pérdida de los mismos.
Guillermo Pérez, reportero ciudadano que publica en la independiente revista El Majadero de Artemisa, señalaba a inicios de julio varias de las razones por las que los apagones son tan frecuentes en la isla.
"El mal estado de las líneas, la inestabilidad en la producción eléctrica que produce alteraciones en el servicio y la poca disponibilidad de combustibles para garantizar el imprescindible servicio, figuran entre las razones del corte eléctrico", escribió Pérez.
Pero detrás de los cortes de electricidad está la urgencia de ahorrar combustible en el país por la reducción del envío de crudo desde Venezuela.
El gobierno se ha visto obligado a buscar alternativas, y entre ellas figura el corte en el sector estatal al que incumpla el plan de energía.
A las instituciones estatales como hospitales, farmacias y servicentros “les quitan la corriente cuando se pasan del “plan de consumo y ahí se afectan todos”, precisó la pastora Julia Pina, residente en Bayamo, provincia Granma.
Un informe comercial interno de PDVSA al que tuvo acceso la agencia Reuters a inicios de este mes, indica que el Gobierno venezolano envió a Cuba en la primera mitad del 2017 un promedio de 72.350 bpd de crudo y productos, casi un 13% menos que en el mismo periodo del año pasado.
Cuba consume unos 130.000 barriles de petróleo diarios (bpd) y produce aproximadamente 50.000 bpd, pero el petróleo local es pesado y solo puede usarse en la generación eléctrica y la producción de derivados.
(Redactado por Idolidia Darias, con reporte de Adriel Reyes e información de El Majadero de Artemisa y Reuters)
