El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, viajó a Ecuador y Nicaragua los días 19 y 20 de noviembre, para tratar con sus presidentes, Rafael Correa y Daniel Ortega, respectivamente, la situación de los 1.500 emigrantes cubanos varados en la frontera de Costa Rica y Nicaragua.
"El ministro de Relaciones de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, realizó visitas de trabajo a Ecuador y Nicaragua, los días 19 y 20 de noviembre, ocasión en la que intercambió con las autoridades de ambos países sobre temas de la agenda bilateral y regional, incluidos los asuntos migratorios", señala una escueta nota oficial divulgada hoy en el noticiero de la televisión estatal.
Una nota en el dominical Juventud Rebelde afirma que el ministro cubano de relaciones exteriores "fue recibido por los compañeros (presidentes) Rafael Correa y Daniel Ortega", e "intercambió con las autoridades de ambos países sobre temas de las agendas bilateral y regional, incluidos los asuntos migratorios".
Desde el pasado sábado, Costa Rica ha recibido una oleada de unos 2.500 emigrantes cubanos en su frontera con Panamá, con el objeto de continuar su camino por Centroamérica hasta Estados Unidos, y la mayor parte de ellos procedentes de Ecuador, el único país de la región al que los cubanos pueden entrar sin visa.
Costa Rica les otorgó visas temporales de tránsito, pero el pasado domingo 15 de noviembre, Nicaragua cerró su frontera, con lo que en estos momentos hay unos 1.500 cubanos varados en nueve albergues en los que reciben asistencia humanitaria.
Para solucionar esta situación, hay convocada para el próximo martes en El Salvador una reunión de cancilleres del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) -Panamá, Costa Rica, Nicaragua y Guatemala-, ampliada a Cuba, México, Colombia y Ecuador; todos los países que los cubanos atraviesan antes de llegar a EE.UU.
Los cubanos emprenden este largo viaje hasta EE.UU, donde esperan conseguir permiso de residencia, acogidos a la Ley de Ajuste, política estadounidense a la que Cuba responsabiliza de esa situación, según un comunicado de la Cancillería de la isla de esta semana.