El Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) informó que el viernes hubo 35 nuevos diagnósticos de COVID-19, una cifra aún alta en comparación con los reportes de mediados de julio.
En los últimos días se han confirmado 689 casos, y en 13 de ellos no se ha podido precisar la fuente de la infección, dijo el Dr. Francisco Durán, director de Epidemiología del MINSAP.
La inmensa mayoría de los contagios diagnosticados el viernes son de La Habana, 30 de los 35, y se distribuyen en 10 municipios de la capital: ocho de Arroyo Naranjo, cinco de Boyeros, cuatro de La Lisa y otros cuatro de Marianao, tres de La Habana del Este, dos de Playa, y en Guanabacoa, Regla, Centro Habana y Cerro un caso cada uno.
“Como es natural, quisiéramos que no fuera así, y en La Habana su consejo de defensa está trabajando duro para resolver esta problemática, pero todavía la dispersión que tenemos en La Habana es de magnitud, y lo dice la distribución de los casos por municipios”, declaró el Dr. Durán.
Por provincias son La Habana, Artemisa y Pinar del Río las de mayor incidencia de la enfermedad en los últimos 15 días, y a escala de municipios en la región occidental del país los más afectados son Habana del Este, La Lisa, Boyeros, Plaza de la Revolución, Diez de Octubre, Arroyo Naranjo, Mariel (Artemisa), Playa, Marianao, San Miguel del Padrón, La Palma (Pinar del Río), Centro Habana, Cerro, Guanabacoa, Cotorro, San Cristóbal (Pinar del Río) y Bauta, en Artemisa.
“Cada vez que me preguntan digo: no, tú te tienes que proteger aunque vayas a Baracoa, que no tiene casos hace ya mucho tiempo; pero tienes que protegerte porque tú no sabes quién puede estarla transmitiendo, teniendo en cuenta las características de los asintomáticos; pero indiscutiblemente en estos lugares es mucho mayor el riesgo”, insistió el especialista.
De hecho, la provincia de La Habana tiene una tasa de incidencia de 25.24 casos confirmados por cada cien mil habitantes, seguida por Artemisa con 17.29; Pinar del Río con 4.80 y Villa Clara con 2.83, añadió.
El viernes se mantenían ingresados en todo el país 1,232 pacientes, 520 de ellos como enfermos diagnosticados, 44 bajo vigilancia y 668 sospechosos. Hubo 55 personas que salieron de alta, y de los 520 enfermos, 503 muestran una evolución clínica estable, dijo el Dr. Durán.