Rusia utiliza a Cuba con una fallida política de Guerra Fría, dice el documento que traza la nueva estrategia de Seguridad Nacional de Estados Uniodos, presentado este lunes por el presidente Donald Trump.
En el capítulo dedicado al Hemisferio Occidental, indica el texto que "en Venezuela y Cuba, los gobiernos se aferran a los anacrónicos modelos autoritarios de izquierda que siguen fallando a su gente", y es donde aparecen Rusia y China. "Los competidores han encontrado espacio operativo en el hemisferio", dice el texto.
"China busca llevar la región a su órbita a través de inversiones y préstamos dirigidos por el Estado. Rusia continúa su fallida política de la Guerra Fría aupando a radicales aliados cubanos, mientras Cuba continúa reprimiendo a sus ciudadanos".
El documento de "La Estrategia de Seguridad Nacional" ordenado por el Congreso presenta a China y Rusia como sus máximos competidores, quienes pretenden redibujar el poder global para sus intereses,
potencialmente amenazando a los Estados Unidos. El documento fue elaborado por el equipo de Trump durante "casi un año".
En la nueva estrategia de seguridad nacional, Trump prioriza los intereses del país frente al mundo, y reconoce que potencias como Rusia y China se han erigido como "poderosos rivales" que pueden suponer potenciales amenazas.
El documento identifica cuatro pilares de la estrategia: proteger la patria, promover la prosperidad de EEUU, preservar la paz mediante la fortaleza e impulsar la influencia estadounidense.
En un discurso ofrecido en el Centro Ronald Reagan, en Washington, el mandatario reconoció los nuevos retos a lo que se enfrenta EEUU.
Trump insistió en que primero hay que reconocer "los errores del pasado para colocar a Estados Unidos en el lugar que merece", y enfatizó la necesidad de "crear fronteras", "proteger la patria" e incluir un plan económico internacional que defienda también sus intereses.
Trump pretende hacer frente a dichas amenazas entendiendo también las necesidades de colaboración con Moscú y Pekín. "La estrategia se refiere a China como un competidor estratégico (...) China está efectivamente en el dominio político, económico, militar e informativo de maneras que probablemente no sean replicadas por nuestros otros competidores", explicó un funcionario de la Casa Blanca, en una conferencia telefónica previa al discurso de Trump.
"Sabemos que necesitamos a China, para continuar trabajando con ellos en el problema de la RPDC (República Popular Democrática de Corea o Corea del Norte). No es mutuamente excluyente. Estamos trabajando juntos para cooperar al mismo tiempo que reconocemos que también existe competencia", agregó la misma fuente.
(Con información de EFE, la Casa Blanca, y redes sociales)