Cubana de Aviación, la aerolínea estatal caribeña envuelta el mes pasado en un accidente aéreo donde murieron 112 personas, reconoció este jueves que la decisión de cancelar cinco rutas nacionales y reducir frecuencias de vuelos se debe a que no disponen de aviones suficientes para cubrir sus operaciones.
"Las cancelaciones y ajustes de itinerarios obedecen a que actualmente no contamos con la cantidad de aeronaves necesarias para cubrir la totalidad de los vuelos, lo cual no tiene vínculo directo con el lamentable accidente del pasado 18 de mayo y es resultado de problemas agravados durante los últimos meses", reveló la compañía.
La aclaración de la veterana empresa aérea cubana -fundada en 1929- se produce en medio de numerosas reclamaciones de viajeros que exigieron conocer las causas de los ajustes, anunciados por la aerolínea en un escueto texto el pasado martes.
Cubana, la única compañía aérea que opera vuelos nacionales en
Cuba, informó entonces que cancelaba hasta nuevo aviso sus viajes
hacia las ciudades orientales de Camagüey, Moa, Manzanillo, Bayamo y
Guantánamo.
También precisó que reduciría a una sola frecuencia diaria sus operaciones a Santiago de Cuba y Holguín, ambos polos importantes turísticos del este cubano, y dijo además que volaría una vez por semana a Baracoa, en el extremo más oriental de la isla.
Entre las razones de la medida, Cubana mencionó dificultades en "la contratación de piezas de repuesto y reparación de aeronaves, que en muchos casos debe realizarse en el exterior", según el comunicado publicado hoy en la web oficial Cubadebate.
"Cubana de Aviación reitera sus disculpas a toda la población y enfatiza que trabaja en las acciones que permitan revertir la situación actual", recalca la nota.
Este anuncio coincide con la crisis de confianza que sufre la empresa, que protagonizó en mayo pasado una de las peores tragedias aéreas de la historia del país, cuando un Boeing 737-200 rentado por Cubana a la compañía mexicana Global Air se estrelló minutos después de despegar de La Habana por causas aún desconocidas.
El vuelo accidentado se dirigía a Holguín (oriente) y en él viajaban 113 personas, de las que murieron 112: 101 cubanos y once extranjeros, incluidos los seis miembros mexicanos de la
tripulación.
En la actualidad Cubana de Aviación solo mantiene sin modificar las dos salidas diarias de la ruta que conecta a La Habana con la Isla de la Juventud, ubicada al sur del territorio cubano y a la que solo se puede llegar por aire o mar.
"Cubana de Aviación está consciente de la afectación creada a los pasajeros", insistió la compañía, que prometió el reembolso del valor total de los boletos aéreos hasta un año después de la fecha de compra.
La empresa informó además que "comprendiendo el problema generado
a muchas familias que ya tenían sus vacaciones (de verano) planificadas" coordina con otras empresas de terrestre para "ofertar otras alternativas".
(Con información de EFE)
