Los Juegos Olímpicos de verano concluirán este domingo, 8 de agosto, en Tokio con retraso de un año de celebración debido a la situación de la pandemia, que aún afecta a todo el mundo, sobre todo ahora, con la cepa Delta.
Uno de los pocos peloteros cubanos que ganaron preseas doradas en el béisbol olímpico de Barcelona y Atlanta fueron Juan Padilla, Omar Linares, Orestes Kindelán, José Estrada, Luis Ulacia, Omar Ajete y el antesalista de San Miguel del Padrón Lázaro Vargas.
Vargas, además de dirigir a Industriales en Series Nacionales, como jugador ganó títulos mundiales, Copas Intercontinentales, Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe, además de coronas con Industriales, sobre todo aquel título en 1986 que decidió Agustín Marquetti, quien también vive en la ciudad de Miami.
Vargas es dueño de un negocio de comidas en Miami, donde si usted saborea un sabroso pan con lechón cubano, da jonrón.
El hijo de Vargas, Miguel, es uno de los prospectos de la organización Dodgers de Los Ángeles en la esquina caliente.
En la actual temporada en Ligas Menores, Miguel Vargas, en 80 partidos en las clases A, Doble A y Doble A avanzada con los Dodgers, batea para un promedio ofensivo de 302, con 15 jonrones y 47 carreras impulsadas.
Miguel es el futuro tercera base de Los Ángeles, actual campeón de la Serie Mundial de las Grandes Ligas.