Otros 61 cubanos interceptados en alta mar la semana pasada fueron repatriados este lunes, informó la Guardia Costera de Estados Unidos en un comunicado. El sábado, la misma autoridad repatrió a 75 migrantes cubanos.
La agencia gubernamental indicó que los migrantes fueron detenidos mientras navegaban en diferentes grupos y en precarias embarcaciones hacia la costa sur estadounidense entre miércoles y viernes.
En todos los casos las detenciones se registraron en aguas cercanas a Islamorada y Cayo Hueso.
En las operaciones de detección participaron unidades de la aviación de los guardacostas y de la Dirección de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos.
Una vez que son interceptados en el mar, todos los migrantes reciben comida, agua y atención médica básica a bordo de las embarcaciones de los guardacostas. Los que así lo requieren, son llevados a tierra y hospitalizados.
“Si no fuera por nuestras embarcaciones y aviones que patrullan estas aguas, los resultados de esos viajes podrían haber sido muy diferentes”, dijo el teniente Connor Ives, oficial de seguridad del Distrito Siete de la Guardia Costera. “No hay mayor misión que salvaguardar vidas en el mar.”
La embarcación William Flores se encargó de trasladar a los repatriados hasta el muelle Orozco, cerca del Puerto de Cabañas, en la provincia de Artemisa.
Aquellos que demuestran miedo creíble a ser deportados, o precisan de protección contra la persecución o la tortura en su país de origen, reciben un tratamiento diferente.
Desde el primero de octubre hasta la fecha, la Guardia Costera repatrió a más de 1.379 cubanos.