La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, tiene una clara ventaja sobre el candidato opositor Aécio Neves y ganaría la segunda vuelta de la elección presidencial el domingo por entre seis y ocho puntos porcentuales, según mostraron el jueves dos sondeos.
Las encuestas mostraron que la agresiva campaña de la gobernante izquierdista contra el senador Neves, el favorito de los mercados, ha tenido éxito en aumentar el apoyo propio e incrementar el rechazo a su rival, en la elección más disputada de las últimas décadas.
Rousseff ha ganado terreno recordándoles a los votantes el crecimiento de los salarios y la expansión de los programas sociales en los últimos 12 años de gobiernos del Partido de los Trabajadores, unos beneficios que dice que están en riesgo porque Neves gobernará para la elite.
Los sondeos son los primeros de las grandes encuestadoras Ibope y Datafolha en los que Rousseff supera a Neves por una diferencia superior al margen de error, de más/menos 2 puntos porcentuales en ambos casos.
El sondeo de Datafolha mostró que Rousseff obtendría un 53% de los votos válidos en el balotaje del 26 de octubre contra un 47% de Neves y que la presidenta cuenta con un 48% de respaldo de los votantes contra un 42% de Neves.
En tanto, la encuesta de Ibope mostró que Rousseff obtendría un 54% de los votos válidos en la segunda vuelta electoral frente a un 46% de Neves. Además, la mandataria tendría un 49% de respaldo contra un 41% de Neves.
Según el sondeo de Ibope, la cantidad de brasileños que dicen que nunca votarían por Neves aumentó en 7 puntos porcentuales a un 42% del total.
Neves ha insistido en que se mantendrán los programas sociales y recortará otros gastos del Gobierno, en que controlará la inflación y terminará con las políticas intervencionistas para restaurar la confianza de los inversores en una economía que entró en recesión en el primer semestre.
Sin embargo, sus promesas de recuperación económica parecen haber perdido atractivo entre los votantes brasileños que se muestran cada vez más optimistas sobre las perspectivas para la economía de Brasil, según una encuesta de Datafolha.
Rousseff ha conseguido impulso en las últimas dos semanas entre la clase media baja de Brasil, que ha ganado acceso a bienes modernos y educación durante el mandato del Partido de los Trabajadores.
Ibope entrevistó a 3.010 votantes entre el 18 y el 23 de octubre, mientras que Datafolha consultó a 9.978 personas entre miércoles y jueves.