El preso político Ramón Pérez Conde llevaría al menos 10 días en huelga de hambre en la prisión Valle Grande de La Habana.
“Es en protesta por su encarcelamiento injusto, dado que entiende, tanto él como cualquier persona, que su encierro es parte del sistema opresor”, indicó Elianne Martínez Rodríguez, coordinadora de la Embajada Cívica Cubana, organización a la que pertenece el prisionero político.
“Conocimos que ‘Moncho’, Ramón Pérez Conde, fue visitado por su hermano Guillermo en Valle Grande a solicitud de las autoridades de la misma prisión, para que intentara convencer a Moncho de que se alimentase. Su estado de salud es bastante preocupante. Está extremadamente delgado”, explicó Martínez.
“Ellos [los mandos penitenciarios] incluso le han hecho firmar un documento donde les exonera de cualquier responsabilidad futura en cuanto a que esto tuviese un desenlace fatal. Y estamos bastante preocupados y además solidarizados con el dolor de su madre, Ana, de setenta y ocho años que desde el 23 de junio no le ve”, dijo.
Pérez Conde fue detenido el 23 de junio de 2021, tras ser citado a la 11ª. Unidad policial de San Miguel del Padrón, presuntamente, por una serie de denuncias que hizo en redes sociales. Ese mismo día, la fiscalía municipal le ordenó prisión provisional por el delito de “desacato” y fue trasladado al Combinado del Este. Más adelante, a la cárcel Valle Grande.
De acuerdo con ADNCuba, Pérez Conde “denunció la ‘mentira’ de la ‘potencia médica’, que vende el castrismo”, y aseguró que, para lograr una intervención quirúrgica a su madre casi octogenaria, Ana María Conde, tuvo que pasar por “cinco hospitales y tres policlínicos”.
Agentes de la Seguridad del Estado lo habían amenazado con encarcelarlo si seguía haciendo directas en Facebook.
Tras 38 días en prisión provisional, Pérez Conde aún no ha sido juzgado.
Consultado sobre el caso, el abogado independiente Julio Ferrer señaló que “según el artículo 107 de la Ley de Procedimiento Penal, las autoridades tienen para retenerlo 180 días, seis meses contados, a partir de la fecha de la Resolución que impuso la medida cautelar”.
Un día antes de su aprehensión, la policía le impuso una multa de 2000 pesos por “propagación de epidemias”.
Amnistía Internacional declaró el pasado julio a Ramón Pérez Conde como prisionero de conciencia.
