La ciudadana estadounidense de ascendencia cubana Mirtza Ocana se halla en libertad bajo fianza no garantizada, tras haber sido arrestada el lunes pasado en el Aeropuerto Internacional de Tampa, noreste de Florida, cuando intentó ingresar a Estados Unidos cien mil dólares sin declarar, hecho tipificado como delito de contrabando de dinero en efectivo.
Según la denuncia penal firmada por el agente especial, Víctor Valentín, perteneciente a la unidad de investigación del Departamento de Seguridad Nacional (HSI/DHS), la mujer de 38 años llegó a la terminal aérea alrededor de las 10:15 a.m., en un vuelo procedente de Cuba, y en una inspección rutinaria a pasajeros de vuelos internacionales, dijo a los Agentes de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) que no tenía nada que declarar.
Sin embargo, al ser cuestionada sobre la cantidad de dinero que llevaba consigo, respondió que tenía alrededor de 10,000 dólares producto de la venta de una casa en Cuba. Al revisar el equipaje de Ocana, los agentes encontraron 30,000 dólares distribuidos en tres paquetes diferentes.
La ley estadounidense establece que cualquier persona que ingrese al país con una cantidad superior a 10,000 dólares debe declararlo.
Acto seguido, procedieron a su arresto, advirtiéndole sobre sus derechos según lo establecido por la ley Miranda, incluyendo el derecho a permanecer en silencio y el derecho a obtener representación legal.
Ocana accedió a hablar con los agentes y admitió haber ingresado dinero de contrabando a Estados Unidos procedente de Cuba desde junio de 2023, realizando entre 2 y 3 viajes mensuales a la isla para ello. A cambio de este servicio, afirmó que había recibido pagos entre 1,000 y 2,500 dólares. Una revisión de su historial de viajes al exterior reveló que había visitado Cuba 45 veces desde el 29 de mayo de 2023.
Cuando se le preguntó si sabía que ingresar esa cantidad de efectivo a Estados Unidos sin declararlo era ilegal, Ocana respondió afirmativamente. Después de la entrevista, los agentes llevaron a cabo un cateo personal y encontraron otros 70 mil dólares. En total, se le incautaron aproximadamente cien mil dólares.
“Basado a la información contenida en esta declaración, sostengo que hay causa probable para creer que Mirtza Ocana ocultaba a sabiendas más de 10,000 dólares con la intención de evadir un requisito de declaración de dinero en efectivo en violación de la ley 31 U.S.C 5332”, escribió el agente especial Valentín.
La libertad bajo fianza no garantizada es un compromiso por escrito en el que el acusado se compromete a comparecer ante el juez, y en caso de no hacerlo, deberá pagar la cantidad de dinero establecida en el acuerdo.
Documentos del Tribunal Federal del Distrito Central de Florida, en Tampa, firmado por el Magistrado Sean P. Flynn, indican que a Ocana le ha sido asignado el abogado de oficio, Stephen Consuegra en sustitución de Kathleen M. Sweeney.
En futuras audiencias, que aún no han sido programadas, Ocana, que no habla inglés, recibirá la asistencia del traductor James Plunkett.
Si es declarada culpable de todos los cargos, la cubanoamericana enfrenta una pena máxima de cinco años en una prisión federal.
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