En medio de la jornada de protestas populares en varias ciudades de Cuba, el gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, compareció en Televisión Nacional para convocar a los revolucionarios y comunistas a salir a las calles donde quiera que se den las manifestaciones.
Con camisa negra, mascarilla y hablar apresurado, durante unos 20 minutos, pasadas las 4 de la tarde, habló desde la sede del gobierno en el Palacio de la Revolución, acompañado de los miembros del secretariado Roberto Morales y Rogelio Polanco y varios periodistas.
Mencionó que le acompañaron a una visita rápida a San Antonio de los Baños, horas después que en este pueblo estallará la chispa inicial de la ola de protestas que se han extendido a toda la isla en el transcurso del día.
Diaz-Canel comenzó la intervención declarando las dificultades que tiene la isla en la actualidad y destacando la capacidad de “resistencia del pueblo cubano”. Hizo mención a lo que considera “dificultades sanitarias” en Matanzas y Ciego de Ávila.
Criticó la intervención y corredor humanitario y de nuevo volvió a pedir el levantamiento del embargo estadounidense, alegando que no hay fundamentos legales para que un gobierno se niegue a comerciar con otro.
El sucesor de Raúl Castro, que ha sido repudiado desde hace meses con el grito de "Díaz-Canel si....", una frase que han coreado este domingo miles de cubanos en todo el territorio nacional, negó en la comparecencia que en la isla exista una dictadura y declaró que la isla no tenía dinero para comprar las vacunas en el mercado internacional y una vez más consideró que son atacados cuando la opinión pública internacional pide un corredor humanitario que lleve medicamentos y alimentos a la isla, severamente golpeada por la crisis económica y la pandemia.
A su juicio lo acontecido en San Antonio de los Baños se debe a “situaciones severas” y dijo que entre los manifestantes hay "gente de pueblo con carencias y dificultades, revolucionarios confundidos, con insatisfacciones. Pero que estaba encabezado por un grupo de manipuladores que lanzan campañas de #SOSMatanzas, #SOSCuba, y en vez de estar las personas en las casas, protegidos, no en las calles".
Al mencionar el levantamiento, se limitó a citar lo sucedido en San Antonio de los Baños, cuando en realidad se han producido manifestaciones en numerosas ciudades y poblados de Cuba.
"Hay otras localidades donde se han realizado movidas con propósitos malsanos” declaró y agregó que “las calles son de los revolucionarios”.
"Estamos dispuestos a todo", dijo el gobernante e hizo referencia a que conoce de planes para desestabilizar al régimen y de “masas revolucionarias” en las calles de La Habana dispuestas a luchar.
