Hace dos semanas Martí Noticias entrevistó al escritor ecuatoriano Óscar Vela a propósito de su más reciente novela “Náufragos en tierra”, inspirada en la vida de César Gómez (99 años de edad), un expedicionario del Granma que renegó de Fidel Castro, escapó de Cuba en 1961 y no ha regresado nunca más.
Luego de aparecer la mencionada reseña-entrevista, el escritor, ensayista y político cubano Carlos Alberto Montaner recordó los momentos que compartió con Gómez en la embajada de Venezuela en Cuba, donde ambos se asilaron para salir definitivamente del país.
Montaner y Gómez compartieron la misma habitación en la legación diplomática en la capital cubana junto a Manolo Fernández –ex ministro de Trabajo antes de 1959-, Gustavo Ortiz Páez y Carlos Varona.
El programa Contacto Cuba, de Radio Martí, y la valiosa colaboración de Óscar Vela propiciaron un diálogo entre estos dos cubanos que llevaban 56 años sin conversar:
Carlos Alberto Montaner (CAM): César, soy Carlos Alberto.
César Gómez (CG): ¡Cuánto gusto! Tantos años sin vernos, pero ahora la suerte de poder encontrarte otra vez.
CAM: Pero, sabe que has estado presente en muchas conversaciones que yo tuve con Carlos Varona (Duque-Estrada, quien laboró en el Ministerio de Trabajo a inicios de la revolución) y Ana Varona, te quería mucho y hablábamos de ti. Sabía que te habías ido a Colombia…
CG: Yo me quedé del lado de acá, encontré ayuda y acogida en Colombia y me desarrollé y hoy día estoy viviendo hace 56 años acá.
Gómez trabajó en una empresa de distribución y luego fue nombrado representante para las ventas en Centroamérica.
Carlos A. Montaner es autor más de una veintena de libros sobre política e historia y ficción. Sus columnas periodísticas, a través de Firmas Press son leídas semanalmente por cientos de miles de lectores en el ámbito hispanoamericano.
En la conversación César rememoró su participación en los preparativos del yate Granma, su labor en la recogida de armas y su detención por parte de la inteligencia mexicana –acusado de tráfico de armas-, hasta que dilucidaron que se trataba exclusivamente del intento por derrocar a la dictadura de Batista.
CAM: ¿Tú estuviste en el adiestramiento que tuvieron las personas que desembarcaron en el Granma?
CG: Sí, el primer campamento que se creó fue en las montañas, ahí estuvo el Che, Juan Almeida, el gordo Smith y yo hasta que un día Fidel me ordenó trasladar unas armas desde el DF hacia Mérida, de donde pensábamos que sería la salida de la expedición a Cuba.
Días después del desembarco, el 2 de diciembre de 1956 por Las Coloradas, en la región de Oriente, Gómez recibió la orden de bajar a buscar alimentos y otros pertrechos y fue hecho prisionero hasta el mismo 1ero de enero de 1959.
Sobre su desavenencia con Fidel Castro y la revolución cubana Gómez recuerda:
CG:Cuando fuimos puestos en libertad en Isla de Pinos, Armando Hart y yo nos ocupamos del campamento de Columbia, nos hicimos cargo, nos lo entregaron y tratamos de hacer contacto con Fidel. (…) Me fui al Ministerio (de Trabajo) con la encomienda de crear grupos obreros adeptos a la revolución porque la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) estaba en manos de los comunistas y a la vez tenían el periódico Hoy y tres ministros colaborando con la dictadura. Entonces mi misión con Manolo era crear dirigentes obreros pertenecientes a la revolución.
Un giro -inesperado para muchos de los participantes en aquella lucha- hacia el comunismo, llevó a Gómez “guiterista y revolucionario” a plantarle cara Castro y sus seguidores.
CG: En el mes de junio de 1959 Raúl (Castro) me citó a una reunión en casa de Yeyé (Haydeé Santamaría) y Armando (Hart) para hablar con viejos revolucionarios y tratar de que nos uniéramos y admitiéramos la unión con el Partido Comunista. Yo me opuse y le dije: ‘Raúl, yo no puedo de ninguna manera aceptar que ahora los comunistas (…) que boicotearon la Huelga General que mandó el movimiento revolucionario… ¿cómo es posible que se me pida ahora que yo acepte la unidad?’. Me opuse, me fui y llamé a la gente y les dije: saquemos los papeles del Ministerio porque nos van a sacar, porque mi posición frente a la petición de unidad, ha sido esta.
Lo que vino -relata el anciano- fue una situación de desavenencias, desencanto y persecución hasta llegar a la idea y decisión de asilarse en la embajada de Venezuela en La Habana.
CAM: Me gustaría saber si hubo una coordinación para el asilo entre Manolo, Carlos Varona Duque-Estrada y César Gómez.
CG: Después que estábamos fuera del gobierno, la gente que tenían movimientos de resistencia nos fueron en varias ocasiones a ver, a tratar de que nos integráramos… y el día de la revolución… pensábamos: ¿qué hacemos? estamos en el aire, no pertenecemos a los grupos que están desembarcando, somos contrarios al gobierno, acusados de traidores, entonces estamos en una posición muy difícil.
Nos reunimos allí en un lugar y cuando explotó toda la situación buscamos la solución única que teníamos, que era asilarnos y nos asilamos todos en conjunto, porque estábamos todos ligados por la misma situación.
LFR: Les agradezco a los dos: César y Carlos Alberto, así como a Óscar Vela, por la participación en este programa.
CAM: Gracias a ustedes, y César: un abrazo muy grande y muy contento de escucharte.
CG: Agradezco mucho la oportunidad de recordar y de dejar totalmente en claro que sigo siendo un revolucionario que lucha por la independencia de Cuba y espero, antes de morirme, ver salir del poder a la dictadura y volver a ver a los presos políticos libres y a Cuba independiente.
[Escuche la totalidad de la entrevista en el programa Contacto Cuba, por Radio Martí, emitido el jueves 13 de diciembre a las 4:00 PM.]
