Se habla de un éxodo silencio cuando los entendidos se refieren a esta nueva oleada migratoria cubana. Ya no se debe, señalan, al deshielo entre Estados Unidos y Cuba y el temor de que muera la Ley de Ajuste Cubano, pero se ha dado pese a que “pies secos/ pies mojados", la normativa que permitía la permanencia de los cubanos en Estados Unidos una vez pisaban este territorio, caducó en enero de 2017.
En Tapachula, en el estado mexicano de Chiapas, se ha reportado un conglomerado de caribeños que, según los mismos migrantes, supera los 1,500. “Y siguen llegando”, dijo Amaury González, que junto a su esposa desde Trinidad y Tobago, puso pies en polvorosa hace más de un mes.
“La trabazón es mayúscula porque la oficina de Regulación Migratoria sigue cerrada y no damos más, se agotan los recursos, no tenemos dinero,” dijo el joven corpulento y de voz ronca, pero disfónica, y que es uno de los 300 cubanos que desde hace varios días protagonizan un plantón frente a la oficina de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en Tapachula.
Hace una semana, un grupo de caribeños irrumpió en las instalaciones migratorias de manera desordenada para tramitar los salvoconductos que les permiten su libre tránsito por México y poder llegar a la frontera con EEUU.
Esto hizo que el ente gubernamental suspendiera las operaciones de todo trámite hasta nuevo aviso, dejando en ascuas a los migrantes que ahora no saben qué pasará y comienzan a pensar en lo peor: en la deportación.
Fuentes cercanas al Instituto Nacional de Inmigración (INM) dijeron que posiblemente la semana próxima se reanudarán las operaciones en la referida oficina.
El causante ha sido la espera por el documento, y muchos de los cubanos han denunciado el actuar de funcionarios que acusan de corruptos, supuestos abogados que cobraron entre 400 y 800 dólares por conseguir el salvoconducto. Se conocen casos en que resultaron timados por los supuestos letrados o tramitadores que desaparecieron con sus “honorarios” en el bolsillo.
Sobre el tema, Rubén Zúñiga, reportero de El Diario del Sur, escribió en Facebook: “(…) deberán seguir con las investigaciones de cobro por oficios de salida (salvoconductos), expedidos por personal del INM, Chiapas y entregados a tramitadores, falsos gestores, activistas y abogados quienes cobraban, primero 200 y luego hasta 900 y mil dólares por un trámite gratuito”.
Y continuó diciendo: “Si en verdad le quieren poner "el cascabel al gato", solo basta que verifiquen las grabaciones de las cámaras de video de vigilancia de las oficinas de Regulación Migratoria , ahí verán quienes son los que hacían los trámites, incluyendo a jurisconsultos que trabajaron en una administración municipal local, y que se llevaron una buena tajada, gracias a los "dolaritos" de los cubanos, quienes ya no soportaron el abuso por los excesivos cobros o, ¿acaso desconectaron las cámaras y borraron los videos?”
En declaraciones a El Diario del Sur, el titular del INM, Tonatiuh Guillén, aceptó que se han visto rebasados para atender a la población cubana que permanece en Chiapas, también dijo que se hará una limpia para combatir la corrupción, pero desde una parte administrativa.
Frente a la Comisión de Derechos Humanos, en Tapachula, más de 400 cubanos llevan días plantados. Es ahí donde dicen estar más seguros, porque “Tapachula, es una de las ciudades más peligrosas del territorio azteca“.
“Aquí la federal no se tira, tampoco inmigración, es como un resguardo. Así nos dijo un funcionario de aquí”, manifestó una cubana que no dio su nombre, y que es madre de uno de la veintena de menores que integran el grupo.
Éxodo en silencio, tendencia en ascenso
Que se conozca, ninguno de los cubanos varados en Tapachula, Puerto Obaldía, Panamá, o Necoclí, Colombia, ha salido directamente desde Cuba. Por lo menos han residido un año en países como Guyana, Trinidad y Tobago, Uruguay, Chile, Ecuador, Perú y Brasil. Ya conocen otros estilos de vida, libertades y sistemas de gobiernos diferentes al de su país de origen.
“Para Cuba, ni loco. Esa no es opción, prefiero que me maten. Yo salí para mejorar, pa’ tras, ni pa’ coger impulso”. Son voces que se escuchan entre los varados en Tapachula.
Jorge Duany, director del Centro de Estudios Cubanos de la Universidad Internacional de la Florida, dijo que algunos países latinoamericanos como Panamá, Ecuador, Chile o Uruguay se han convertido en nuevos destinos temporales o permanentes para un creciente número de migrantes cubanos.
“Esta tendencia probablemente se incrementará como resultado de las mayores dificultades para obtener una visa de visitante o inmigrante a Estados Unidos,” comentó el académico.
Duany, que tienen en su haber varias investigaciones sobre movimientos migratorios, señaló, sin embargo, que “esta inusitada movilidad poblacional de los cubanos --que no siempre desemboca en el traslado permanente a otros países-- ha afectado sobre todo a Latinoamérica, aunque también a algunas naciones europeas como España, Italia o Alemania“.
El activista Ramón Saúl Sánchez, del Movimiento Democracia, en Miami, mantiene que se trata de un éxodo silencioso, pero que cada vez cobra voz. “Mientras exista un gobierno que no provee bienestar, que reprime y prohíbe el disenso, habrá migrantes cubanos”, recalcó.
“Está claro que para muchos cubanos "La Yuma" es el destino final del itinerario migratorio, a veces después de un período de residencia más o menos prolongado en otros lugares”, opinó Duany, y recordó que la crisis, aunque se redujo luego de la eliminación de la política de "pies secos/pies mojados" en enero de 2017, no se detuvo.
Sánchez coincidió con Duany, pero con una salvedad. “Siguió, (la crisis) lo que pasa es que se ha dispersado a través de varios países. En Cuba, la gente está asfixiada, y yo creo que se va a incrementar ante la amenaza de la intensificación de un nuevo período especial.”
En medio de este panorama, informes de prensa consignan que Cuba podría tener presencia por primera vez en una caravana organizada por migrantes centroamericanos. Por lo menos la bandera de la isla aparece en una tela que han pintado a mano, y que servirá de estandarte a los caminantes, según una instantánea enviada a la redacción de Radio Televisión Martí.
La Agencia Quadratín da cuenta que los organizadores pretenden reunir unas 2,500 personas, entre ellas estaría el cubano Mikel Hernández, que en declaraciones al medio de prensa dijo que debido al cierre de las oficinas del área de regularización migratoria, no les queda más que unirse al grupo de la caravana de migrantes centroamericanos, que habría salido rumbo norte en las primeras horas de este sábado.
Pasto del crimen organizado
La periodista María de Jesús Peters, corresponsal del diario El Universal, en Tapachula, dijo a Radio Televisión Martí que ya hay rechazo hacia los migrantes entre los habitantes de la ciudad.
“Son muchos, no solo cubanos, centroamericanos y extracontinentales también. Andan por todo el pueblo”, señaló.
Fue Peters quien en días recientes reveló que 13 cubanos que fueron secuestrados en Reynosa la semana pasada habían sido puestos en libertad luego de que familiares en EEUU pagaron un rescate de 1,500 dólares a sus captores.
“El consejo es que utilicen los medios de transporte oficiales, los taxis, los ómnibus de compañías establecidas. Tomen los datos de la chapa y de ser posible una foto del conductor y envíenla a sus familiares”, dijo.
Los secuestrados habían obtenido sus respectivos salvoconductos en Tapachula. Volaron a Reynosa y en el aeropuerto alquilaron el primer taxi que encontraron. El chofer los entregó a elementos del crimen organizado.
Pero en Nuevo Laredo, localidad fronteriza con el estado de Texas, Radio Televisión Martí pudo conocer que hay varios cubanos secuestrados. Uno de ellos logró escapar y luego de pedir el anonimato ofreció su breve relato.
“Me llevaron a una casa que en la fachada tiene un cartel que dice Estados Unidos. Y de ahí a otra vivienda. Los secuestradores son dueños de una fregadora de carros que está cerca. Si haces bulla o gritas, vienen y te propinan golpizas. Ninguno de los cubanos, estimo son como 30, tiene dinero. Los delincuentes están pidiendo entre 1,500 y 2,000 dólares. Yo me fugué, estoy escondido”, aseguró.
Varados en Necoclí
Unos 3,193 km hacia el sur, en Necoclí, municipio colombiano de Antioquia, hay más de 200 cubanos que quedaron varados en su ruta hacia Capurganá, Chocó, el corregimiento fronterizo con Panamá.
“Estamos acampados en la arena, hay niños y de los más pequeños. No se puede salir hacia Capurganá”, manifestó preocupado Eduardo Ernesto Estrada, que llegó esta semana a Necoclí luego de una larga y difícil travesía irregular desde Trinidad y Tobago. “A Capurganá solo se llega por aire o por mar, y los lancheros están tirados en el piso, nada más que llevan a los turistas, “dijo Eduardo.
Según trascendidos, los habitantes de Capurganá han iniciado una campaña de denuncias y protestas contra los migrantes, a quienes culpan de desórdenes públicos y la inestabilidad de la localidad.
“Por la ruta suramericana vienen muchos más“, advirtió Eduardo.
Los cubanos cuentan con un salvoconducto expedido por las autoridades de Colombia que les permite desplazarse por el país por diez días, pero en Necoclí ya hay preocupación, porque el documento expira y quedan como ilegales.
Una fuente de Migración Colombia en Bogotá dijo a Radio Televisión Martí que estos migrantes tienen su situación migratoria definida, y “son los pobladores quienes no les permiten llegar hacia la frontera con Panamá”.
Por delante resta el tapón del Darién, intransitable trecho de tupida selva que traga humanos. Pero vencerla y llegar a la frontera Norte no lo es todo.
“Aquellos que siguen retando las leyes y regulaciones estadounidenses en materia de inmigración, se arriesgan a ser deportados inmediatamente o a permanecer indefinidamente como indocumentados en territorio americano", señaló Duany.
El periódico estadounidense Los Angeles Times informó que en las últimas horas las autoridades de EEUU pusieron en libertad a 250 migrantes que se hallaban retenidos en centros de detención de Inmigración. Los Centros no dan abasto, al menos en el estado de Texas, según el diario.
Funcionarios de inmigración citados por el rotativo dicen que no hay cupo para procesar a los migrantes en detención. En estos casos, son puestos en libertad con una citación para comparecer ante un magistrado.
El Departamento de Estado ha reiterado que el gobierno de EEUU no promueve ni alienta la emigración ilegal e insta a los ciudadanos que deseen viajar o radicarse en el país, que apelen a los procedimientos oficiales establecidos en embajadas y consulados estadounidenses.
Y aunque la Ley de Ajuste sigue en pie, quienes se juegan la vida y exponen a sus hijos a los peligros más graves por llegar al destino soñado, a menos que presenten pruebas convincentes y fundadas de persecución en su país, son regresados, o en el mejor de los casos, quedan en libertad, pero con la marca de una orden de deportación muy difícil de borrar.