Rusia está llevando a cabo otra campaña de desinformación dirigida a los ucranianos que viven en ciudades y pueblos de la línea del frente para perturbar la evacuación, sembrar la desconfianza en el gobierno ucraniano y fomentar la colaboración.
Las acusaciones de evacuación forzosa de niños de familias que viven en las zonas de hostilidades activas no son ciertas. En marzo de 2023, el Consejo de Ministros de Ucrania aprobó una resolución sobre la evacuación forzosa de niños de dichas zonas.
«No se está hablando de quitar a los niños a sus padres. No se está hablando del uso de la coacción física. La peculiaridad jurídica de la evacuación forzosa de niños es que al menos uno de los progenitores no tiene derecho a negarse a la evacuación y debe acompañar al niño durante la misma», comentó Iryna Vereshchuk, ministra de Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados.
Sin embargo, incluso con el mecanismo para evacuar a los niños de las zonas peligrosas, la policía y los voluntarios siguen teniendo que persuadir a las familias para que acepten marcharse. Algunas se quedan, y nadie se lleva a estos niños por la fuerza.
Los medios de comunicación ucranianos e internacionales han realizado numerosos reportajes sobre cómo se lleva a cabo la evacuación de civiles y niños en Ucrania, incluso de la línea del frente. En el vídeo propagandístico que se convirtió en la base del bulo ruso, un hombre menciona a una familia de tres niños cuya madre murió, diciendo que en realidad fueron entregados para el tráfico de órganos, o a pedófilos. Pero también se pueden encontrar noticias sobre esta familia: los voluntarios se los llevaron a sus familiares. La policía regional de Donetsk afirma que la policía de menores de la región de Donetsk está en contacto permanente con los niños, ya que los huérfanos necesitan ayuda.