La propaganda rusa ha vuelto a recurrir una vez más a artículos de medios extranjeros para difundir narrativas de desinformación sobre el supuesto empeoramiento de las relaciones entre aliados: EEUU y Ucrania. Para ello se tomó el artículo del NYT: Están surgiendo decepciones mutuas en la alianza EEUU-Ucrania (“Mutual Frustrations Arise in US-Ukraine Alliance”). En realidad, el artículo de NYT no menciona una ruptura en las relaciones entre los países, y más aún por culpa del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy. Los periodistas hablan de que ambas partes están descontentas: por parte ucraniana, por el retraso de la ayuda y el largo debate sobre nuevas transferencias de armas, y por parte estadounidense, por el hecho de que Kyiv no haya hecho caso a los consejos del Pentágono de concentrar todas sus fuerzas en una gran batalla en lugar de «malgastar sus fuerzas luchando por ciudades que, según los funcionarios estadounidenses, no tienen ningún valor estratégico.»
A pesar de las evidentes diferencias, los periodistas escriben lo siguiente: “Ni los estadounidenses ni los ucranianos quieren salir (de la alianza, ed.). Sus obligaciones permanecen sólidas, ya que ambas partes son interdependientes. La comunidad de inteligencia estadounidense sigue proporcionando al ejército ucraniano una cantidad significativa de información en tiempo real sobre puestos de mando rusos, depósitos de munición y otros nodos clave a lo largo de las líneas militares rusas. El Pentágono sigue celebrando reuniones mensuales del Grupo de Contacto para animar a los socios de Ucrania a proporcionar dinero, armas y municiones.