En condiciones deplorables, sin las medicinas e insumos que requiere como diabético y precaria alimentación, se encuentra desde la semana pasada en la prisión de Guanajay el periodista independiente Jorge Bello Domínguez.
El preso político fue trasladado hacia ese penal desde el Combinado del Este sin previo aviso ni tiempo para recoger sus pertenencias, informaron sus familiares a Martí Noticias, que lograron visitarlo el viernes.
En Guanajay las condiciones son aún peor que en el Combinado del Este, aseguró su esposa Yuleidy López González.
"El día de la visita, que fue el viernes, todavía no le habían dado la dieta que le corresponde por su condición médica (…). Ya llevaba tres días sin la dieta médica, y sin inyectarse, porque no había jeringuillas”, dijo la mujer.
Explicó que las condiciones en ese centro penitenciario “son deplorables”, y a pesar de esa situación, los guardias prohíben a los reos pasar los alimentos que les llevan los familiares al almuerzo cuando les corresponde la visita.
López González señaló que desde que trasladaron a su esposo a esa prisión, se alimentaba de lo poco que le quedaba del saco con vituallas de la visita anterior, porque la comida que le dan en Guanajay “no hay quien se la coma”.
Las condiciones del lugar destinado a las visitas familiares tampoco son adecuadas.
“La visita allí, en el público, es un familiar encima de otro, un preso encima de otro, porque aquello es un hueco. En aquellos baños no se puede entrar, y me quedo corta con todo lo que te puedo contar”, aseguró la esposa del comunicador.
Por su parte, su madre, Marta Domínguez, expresó preocupación por las condiciones en las que vio a su hijo.
"No se está sintiendo bien de salud, desde el Combinado viene con un fuerte dolor de muela. Todavía no le han dado asistencia médica, eso me preocupa mucho. Allí eso es horrible, desde que llegamos pasamos trabajo para entrar, para revisar las cosas. Mucho público, un comedor muy estrecho para tantas personas, uno al lado del otro que no nos podíamos mover”, dijo.
Sobre la comida, coincidió con la nuera: “Me quedé fría, aquello era un agua sucia con un poquito de papa. Lo poco que pude ver, aquello no es ni comida, eso ni un perro se lo come”.
Domínguez añadió que la situación de salud de Jorge no es la mejor.
“Jorge es un hombre diabético; yo tuve que llevarle la jeringuilla de la calle y pedir a amistades para poder suministrar su insulina y algodón, porque ni eso hay allí en el penal. Me dijo que no le dieron tiempo de coger esos medicamentos, porque las agujas, todo estaba en la enfermería, y que no se había podido inyectar la insulina”.
Jorge Bello Domínguez, de 49 años de edad, cumple 15 años de condena por su participación en las protestas populares del 11 de julio de 2021 en el poblado de Güira de Melena, en la provincia de Artemisa. Fue sentenciado por el Tribunal Militar de la Región de Occidente por los presuntos delitos de sabotaje con carácter continuado, robo con fuerza, desórdenes públicos y desacato.
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