El ex prisionero político y de conciencia Jorge Luis García Pérez (Antúnez) presentará en Miami su nuevo libro “Crónicas del presidio”, un compendio de historias ocurridas en las cárceles cubanas y que recorre casi seis décadas de represión sufridas por él y los prisioneros que le antecedieron.
El próximo 21 de octubre a las 8:00 pm el Museo Americano de la Diáspora Cubana, ubicado en Coral Gables, acogerá la presentación del texto editado por el también integrante del presidio político histórico Ángel D’Fana. El evento cuenta con el patrocinio de la Fundación Inspira América que ha apoyado el opositor cubano y organizado actividades en su favor en varias de sus visitas a Estados Unidos.
“El libro, a diferencia del libro anterior, narra algunas de las principales vivencias, un testimonio más vívido de los lugares, trato de darle nombre a los verdaderos verdugos y es un testimonio de más de trescientas páginas que está prologado por mi amigo, el ex presidente de Uruguay, Luis Alberto La Calle”, explicó Antúnez.
El libro, publicado por Rodes Printing, acoge testimonios que describen en general la experiencia de pasar por las cárceles en Cuba.
“Habla del presidio político, las crónicas más importantes, pero también del presidio común, algo que prácticamente casi nunca se ha hecho porque los presos comunes tienen su historia y muchos de ellos tiene solidaridad para con nosotros y también es un testimonio vivo de lo que sufren ellos en las cárceles”, explicó.
Antúnez, nombre que elige de su segundo apellido materno, pasó 17 años en la cárcel, etapa que decribió en un libro anterior, editado por el Directorio Democrático Cubano, titulado “Boitel Vive”.
Su nuevo libro también responde a la manera en que los oficiales de prisiones intentan tapar lo sucedido dentro de ellas.
“(A) esos represores que una vez en una polémica verbal en la prisión me decían que no, que esos horrores del presidio y los bayonetazos y los golpes habían sido cosas del pasado: aquí está “Crónicas del presidio” y les demuestra que no, que el presidio político existe y las golpizas y atropellos están latentes en la Cuba de hoy”, concluyó.