El Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, fue ovacionado a su llegada el viernes al Teatro Manuel Artime, situado en la Pequeña Habana de Miami, donde lo esperaba una multitud de exiliados y opositores cubanos con grandes expectativas sobre un nuevo rumbo en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Los invitados, -incluidos varias generaciones de exiliados y opositores cubanos-, oyeron emocionados las palabras del presidente Donald Trump sobre su plan para frenar en seco al régimen de La Habana.
La evocación constante de pasajes de la historia del exilio, y la mención de personalidades clave en la lucha por la democracia de Cuba, algunos fallecidos y otros allí presentes, hicieron que el público permaneciera de pie la mayor parte del discurso.
Tras su discurso se dirigió a una mesa ubicada en el escenario, marcada con el sello presidencial para rubricar la orden ejecutiva que traza su política hacia Cuba.
Más que nada, la intervención del presidente semejó a una conversación coloquial por la interacción con el auditorio, que hasta cantó a coro "Happy Birthday" al presidente Trump quien cumplió el dia 14 de junio. Se movía como ante un público que ya había conocido de antemano, bromeó, hizo referencia a su inicio de campaña hace dos años, abrazó a los que se encontraban en la tribuna, dió palmadas en los hombres, firmó autógrafos y se hizo selfies con todo el que se lo pedía.
Al final de su presentación, Trump se acercó a un grupo de invitados para saludarlos personalmente.
Antes el congresista Mario Díaz Balart en un emotivo discurso declaró en Inglés y Español un mensaje para el pueblo cubano "El presidente Trump está con ustedes".
"Tengo un mensaje para el pueblo cubano y todos los que luchan por la libertad ...el presidente Trump no aceptará como normal la supresión de los derechos humanos, no pasará por alto los abusos contra los derechos de los cubanos (...) ahora el pesidente de Estados Unidos está con ustedes", dijo.
Luego intervino el senador Marco Rubio quien hizo un recuento de su primera entrevista con Trump tras su victoria en las elecciones y recordó que el presidente insistentemente le preguntó "¿Qué podemos hacer por el pueblo de Cuba? y éste le respondió: "Vamos a hacer lo necesario para empoderar al pueblo de Cuba".
"Hoy el Presidente viene a Miami para extenderle la mano al pueblo de Cuba", declaró Rubio.
"Este cambio empodera al pueblo de Cuba y no al régimen".
"En seis meses o seis años Cuba va a ser libre y cuando así sea, creo que el pueblo de la isla y la historia dirán que quizás el día de hoy es el momento en que empezó la transición aquí y en este teatro, con cada uno de ustedes y el presidente Trump decidido a hacer lo necesario para ayudar a que la esclavizada isla de Cuba sea libre".
A continuación el vicepresidente Mike Pence, quien llegó antes al teatro y se reunió en privado con una docena de disidentes y funcionarios locales", afirmó en su discurso "Trump va a dejar claro que EEUU está con ustedes".
"(Trump) no está del lado de los tiranos", dijo Pence.
Antes de su discurso, Pence estrechó la mano de cada uno de opositores y les extendió el saludo de parte del presidente Trump.
El Himno Nacional fue interpretado por la cantante cubana Lena Burke.
Entre los invitados destacaron miembros de la Brigada 2506, cubanos veteranos de las Fuerzas Armadas estadounidenses, representantes de organizaciones como Mar Por Cuba y nuevas generaciones de cubanoamericanos republicanos que pertenecen a la legislatura estatal.
Participaron también opositores cubanos residentes en la isla, entre ellos Marta Beatriz Roque, Angel Moya, Antonio Rodiles, Ailer Rodríguez, Jorge Luis García Antúnez, Rolando Rodríguez Lobaina, entre otros.
También asistieron la joven opositora Rosa María Payá y la disidente Bertha Antúnez, residentes en Miami.
En el acto estuvieron representantes de otras comunidades latinas en Florida, entre ellos colombianos y venezolanos.
En las afueras del teatro se apostaron dos grupos de manifestantes, unos a favor de mayor rigor hacia el gobierno de La Habana y otros contrarios a que se reviertan las medidas que favorecen al régimen de Raúl Castro.
El teatro que acogió a Trump en Miami lleva el nombre de Manuel Artime, un oficial del ejército rebelde y combatiente en Maffo, Guisa y Palma Soriano quien en 1959 entendió la traición de Fidel Castro al proceso democrático y se unió en la cruzada por el cambio en la isla. Fue líder de la Brigada 2506.
(Redactado por Rosa T. Valdés, con reporte de Alvaro Alba)
