El activista Miguel Ángel López Herrera, lleva 28 días en huelga de hambre en Guantánamo y a pesar del deterioro de su salud, declara que mantendrá su protesta para exigir respeto y para que le devuelvan las pertenencias que le fueron confiscadas durante un arresto el pasado mes de julio.
López Herrera integrante de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) en Guantánamo dijo que también protesta por el trato cruel, inhumano y degradante que recibió el pasado mes de julio por parte de policías y oficiales de la Seguridad del Estado.
Activistas de la UNPACU y la Dama de Blanco Celina Osoria han estado al tanto de la situación del huelguista y aseguran que ante el deterioro de salud ayer fueron al consultorio del área donde vive el opositor para que le realizaran una visita.
"La enfermera quedó en que pasarían por aquí pero no lo han hecho", dijo este jueves la activista quien asegura que "está bastante decaído y no se sabe lo que pueda pasar con él".
López Herrera fue detenido el 23 de julio pasado por oficiales de la Seguridad del Estado en ropa civil y policías uniformados, que lo montaron en un carro de chapa particular y condujeron a más de 10 km en las afueras de la ciudad de Guantánamo.
Los militares lo despojaron de la camisa, el pantalón, los zapatos, 30 CUC, una memoria USD, su carnet de identidad, la llave de su vivienda y lo abandonaron en el lugar solo con la ropa interior.
Tuvo que regresar así hasta la unidad policial del Parque 24 ubicada en el centro de la ciudad.
