El huracán Beryl, de categoría 3, continúa avanzando este jueves por el Caribe rumbo al sur de las Islas Caimán.
De acuerdo al más reciente boletín del Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés), tenía vientos máximos sostenidos de 120 millas por hora, y se encontraba a unas 55 millas al sureste de la isla de Gran Caimán y a 440 millas al este-sureste de Tulum, en México.
El devastador sistema, que ha dejado al menos siete muertos por el Caribe, se movía en dirección oeste-noroeste a 20 millas por hora sobre el Caribe.
La que había sido la primera tormenta que se convirtió en huracán de categoría 5 en el Atlántico, se debilitó levemente pero continúa como un poderoso huracán. El NHC pronostica que el ojo del ciclón pasaría al sur de las Islas Caimán durante la noche.
En el estado mexicano de Quintana Roo, por donde se prevé que impacte el viernes, las autoridades ya han habilitado refugios por el peligro que representa la tormenta.
A su paso por la costa sur de Cuba, Beryl provocó olas de hasta dos metros de altura en la comunidad costera de Cabo Cruz, en el municipio de Niquero, provincia de Granma.
"Los vientos fueron de 40 km/h sostenidos y rachas de hasta 80 km/h", según observadores de la Estación Meteorológica de esa región citados por la prensa local.
Este miércoles, en la ciudad de Manzanillo se reportó una tormenta local como consecuencia de bandas de alimentación del huracán que provocó caída de árboles y afectaciones en el tendido eléctrico.
El NHC espera que Beryl “alcance o se acerque a la intensidad de huracán mayor” a su paso por las Islas Caimán, y advirtió “vientos fuertes y destructivos y una peligrosa subida del nivel del mar”.
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