Los vecinos del reparto Aduana, en Holguín, fueron testigos de un incendio en la mañana del martes, un suceso que puso en evidencia los riesgos ambientales y la falta de respuesta oportuna de las autoridades de la isla.
Según contaron residentes a Martí Noticias, el fuego comenzó cuando una vecina prendió fuego a un colchón cerca del río que atraviesa el barrio, sin imaginar que el agua estaba contaminada con petróleo, presuntamente vertido por la fábrica de conservas Turquino.
Una vecina que vive cerca del lugar del incendio describió la magnitud del suceso. “Asustadísimo todo el mundo, aquello era una cosa negra, aquella bocanada de humo negro, era una cosa horrible”, relató.
Según la residente, los vertidos de residuos de la fábrica en el estrecho río del reparto son habituales.
“Siempre lo derrama la fábrica, pero nunca había sucedido esto”, afirmó.
El incendio no solo representó un peligro debido al fuego sobre el agua contaminada, sino que también afectó la infraestructura eléctrica del vecindario, explicó la mujer.
“Se echó a perder el transformador, los cables se quemaron y los electricistas terminaron las reparaciones casi anoche”, detalló.
La secretaria del director de la fábrica de conservas Turquino atribuyó el derrame de petróleo a un error humano. “Ese petróleo salió de una caldera de aquí que se derramó por imprudencia del operador. Se está analizando todo y ya se le está dando solución al problema”, aseguró.
La representante de la empresa también dio su versión sobre el incendio. “El incendio no provocó nada grave, no pasó nada. Aquí hubo un derrame de fuel oil, un petróleo con grasa, y entonces una señora que fue a quemar un colchón lleno de chinches, al incendiarlo, el poco combustible derramado en el río sirvió para avivar las llamas”, explicó.
Mientras el fuego avanzaba, los vecinos llamaron a los bomberos, pero según denunciaron en redes sociales, estos tardaron demasiado en llegar. Otro residente del reparto Aduana, identificado solo como Ariel, confirmó la demora.
“Se llamó a las 10:37 a.m. y el video que se filmó muestra que los bomberos llegaron a las 11:25, casi una hora después”, señaló.
El temor a daños mayores llevó a los vecinos a contactar también a la Empresa Eléctrica para que cortaran el suministro de energía, pero, según Ariel, esto nunca sucedió, a pesar del peligro inminente.
“También se llamó a la Empresa Eléctrica para que cortaran la corriente y no lo hicieron. El poste donde está el transformador estaba echando chispas. Todo el mundo estaba asustado por las personas que estaban debajo del poste. Un cable cayó, no le cayó a nadie encima, pero si llega a caer sobre alguien, lo mata”, advirtió.
Este no es un caso aislado. Recientemente, en un incendio ocurrido en Placetas, Villa Clara, vecinos de la localidad denunciaron que los bomberos llegaron al lugar del siniestro sin agua suficiente para sofocar las llamas.
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