El preso político y líder de la UNPACU, José Daniel Ferrer, recibió la semana pasada la visita de su esposa, doctora Nelva Ortega, en la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba.
Ana Belkis Ferrer, hermana del opositor, dijo a Radio Martí que la doctora Ortega “lo encontró extremadamente delgado. La alimentación allí es pésima y muy escasa y en ocasiones en estado de descomposición”.
Ferrer “continúa en la misma celda de aislamiento, en condiciones crueles, inhumanos o degradantes, bajo torturas físicas y psicológicas constantes, con el mismo bombillo encendido las 24 horas del día, con una cámara en la entrada”.
Ana Belkis Ferrer comentó que también hay micrófonos en la celda porque las autoridades quieren impedir que los guardias se solidaricen con él.
Acerca de su salud, dijo que tiene menos temblores y escalofríos, pero sigue con dolor de cabeza y sólo lo sacan al sol dos veces a la semana.
José Daniel Ferrer, exprisionero de conciencia de la Primavera Negra de Cuba, fue detenido junto a su hijo, José Daniel Ferrer Cantillo, cuando se dirigían a participar en las protestas del 11 de julio en Santiago de Cuba. Su hijo está en libertad.